gastronomía
Estos son todos los restaurantes con soles Repsol de Zaragoza
Los soles de la capital aragonesa se encuentran en curiosos lugares, como puede ser un antiguo taller mecánico o varios palacetes en pleno centro de la ciudad.
Huesca y Teruel atesoran importantes soles Repsol, pero es Zaragoza, y en concreto la ciudad, donde más distinciones de este tipo se lucen. En sus calles se encuentran singulares restaurantes donde brilla este astro que anualmente otorga la Guía Repsol.
Uno de ellos es Absinthium, "uno de los restaurantes de moda en Zaragoza". Se ubica en el Hotel Oriente –considerado el más antiguo de la ciudad–, lo que "le otorga un aire clandestino reservado a los conocedores de la buena gastronomía maña". Al frente de los fogones está Roberto Alfaro y Jesús Solanas es el experto bodeguero. La publicación destaca la ostra Rockefeller, le sot-l'y-laisse, bottarga di Muggine, pescado salvaje y los postres de autor imperdibles, entre otros.
Otra ubicación de ensueño es la de Novodabo, en un palacete del siglo XIX del centro de la ciudad. La cuidada atención en sala, en su comedor elegante, es "muy buena". La Guía Repsol señala, entre todos sus platos, la calidad del rodaballo y de la ternera del valle de Tena.
Un chalet de la zona universitaria acoge el Chalet, hasta hace unos meses bajo la batuta de Ángel Conde. Dispone de terraza y jardín a resguardo. A pesar del relevo en los fogones, continúa la esencia de este restaurante emblemático de la ciudad.
Cristian Palacio y Sofía Sanz son el cocinero y una jefa de sala de Gente Rara, que alardean de ser "locos y raros", como indica la Guía Repsol. "Mejor eso que ser aburridos y normales", apelan. Se encuentran en un antiguo taller mecánico del barrio Jesús de la capital aragonesa. "Lo suyo es minimalismo sensato, proponen juegos visuales, apuestan por la sostenibilidad y facilitan la interacción del comensal", describen en la publicación.
La Prensa es el lienzo donde la chef Marisa Barberán y el jefe de sala David Pérez muestran toda su creatividad. "Cocina de autor que pone al día la cocina clásica aragonesa" son los aspectos que más valora la publicación de referencia gastronómica.
David Baldrich es el cocinero que se encuentra en los fogones de La Senda. Fue aprendiz de David Yárnoz en El Molino de Urdániz. La Senda es "un restaurante propio donde se ha propuesto poner en valor el trabajo de pequeños productores aragoneses y transmitir al comensal la historia de esos ingredientes, humildes en su mayoría". El propósito es “ofrecer una suerte de cocina de autor, elaborada, rica en contrastes y entroncada con la alta cocina moderna, apta para todos los bolsillos”.
Era mayo de 2015 cuando nació Gamberro, con Franchesko Vera Morales al frente. Irreverencia y vanguardia son dos pilares, tal y como lo señala la guía. "Pone en práctica el atrevimiento y el descaro, pero lo hace con cabeza y sensatez cubierta de grafitis –destaca-. Sólo así es posible concebir un único menú degustación, de presentaciones llamativas y coloristas, apoyado en tres pilares fundamentales y confesables: producto, técnica y concepto". Tanto él como Flor García, cocinera y en sala, consiguen un resultado de "satisfacción" y "sorpresa".
Goralai es un "restaurante familiar que persigue una cocina creativa de temporada, sin dar la espalda al clasicismo". Con esas palabras lo define la Guía Repsol. En el último año se han mudado al centro de la capital aragonesa, a la plaza de la Santa Cruz. De sus platos, la publicación resalta el jamón de bellota y el ternasco con arroz de cangrejo azul y esturión con salsa de nueces. Además, valoran que la casa dé importancia al postre y muestre un carro de quesos.
El único restaurante de Zaragoza con dos soles Repsol
Ramcés González y Diego Millán son los responsables de cocina y sala, respectivamente, de Cancook. Este es el único restaurante que luce dos soles Repsol en un mismo establecimiento. Abrieron sus puertas en 2014 y, tras un tiempo en el barrio de La Romareda, se emplaza en la calle de León XIII. La guía aprecia "la cocina vanguardista como vocación y plasman su visión de la misma en menús degustación de diferente extensión, cuyo ánimo es no dejar indiferente al comensal con constantes juegos y contrastes de sabor, textura y temperatura". De su despensa destaca el producto aragonés y la bodega.
