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Agencias de viaje reconvertidas en copistería 'low cost' o tienda de recuerdos

Las agentes de viajes señalan que estos gestos no salvan la situación que atraviesan, pero son una forma de mantener el contacto con los clientes para que no dejen de visitar sus oficinas.

Fachada de la agencia de viajes Maje, en la avenida de Santa Isabel de Zaragoza.
Fachada de la agencia de viajes Male, en la avenida de Santa Isabel de Zaragoza.
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Un vistoso cartel de color amarillo, donde se lee "fotocopias 'low cost'", es lo que más llama la atención en el escaparate de una agencia de viajes del barrio de Santa Isabel de Zaragoza, por encima de las promociones de cruceros. Donde en estas fechas tenían que anunciarse viajes navideños con un destino caribeño o avisar de las últimas plazas para un circuito por capitales europeas, se informa del precio de fotocopias. 0.04 céntimos en blanco y negro o 0.10 a color si es A4 y 0.08 bicolor o 0.20 en todas las gamas si es en A3.

"Es una forma de que la gente entre a la oficina, por hablar con alguien..."

"Con las fotocopias a 0.04 gano 0.01 por cada una, lo que no me da ni para pagar la luz, ni mucho menos. Es una forma de que la gente entre a la oficina, por hablar con alguien...", reconoce Ana Campos, de la agencia de viajes Male, situada en la misma avenida de Santa Isabel, la arteria del barrio. A Campos se le ocurrió esta iniciativa porque su hijo ha comenzado la universidad este año y el joven decía que le pedían fotocopias. No obstante, para ello ha tenido que dar cuenta a Hacienda y pagar: "Nada es gratis".

"Gracias a esto he encontrado un sentido a levantar la persiana, aunque no me dé ni para pagar los autónomos o el resto de facturas"

Ro Travel & Services, en la calle de Manifestación de la capital aragonesa, también se ha reinventado: ahora ofrecen recuerdos de Japón e India. "Hemos puesto una zona de tienda, 'souvenirs' del mundo. Si no se puede viajar, al menos que se conozca la cultura de algunos destinos. No es tanto por lo que se pueda ganar, sino por mantener el contacto con los clientes, gracias a esto he encontrado un sentido a levantar la persiana, aunque no me dé ni para pagar los autónomos o el resto de facturas que no desaparecen”, explica Rebeca Olmos.

La situación de las agencias de viaje es "crítica" sin itinerarios internacionales, sin puentes, sin Semana Santa, sin Fiestas del Pilar, sin Imserso o sin lunas de miel. Campos regentaba dos agencias con cinco empleadas, ahora solo tiene una y ha despedido a las trabajadoras a su cargo. "No están de ERTE, las tuvimos que echar porque ya no podíamos. Esto es desesperante", lamenta emocionada. En octubre, Ana ha realizado dos reservas, ambas para empresas que tenían que trabajar fuera de la ciudad.

Ana Campos, de la agencia de viajes Maje, reinventada como copistería.
Ana Campos, de la agencia de viajes Male, reinventada como copistería.
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"Hemos cancelado todos los viajes y hemos solicitado el dinero que habían pagado los clientes a los proveedores, pero algunos no nos lo devuelven -destaca Ana Campos-. Las agencias de viaje somos unas intermediarias, no tenemos el dinero de los clientes porque nosotros lo adquirimos y lo pagamos directamente". En esa idea incide también Olmos.

MSC, Rynair, Iberia o Air Europa son algunas de las compañías que enumeran desde las agencias de viaje. "El problema es que los clientes quieren su dinero. Hay una ley que dice que nosotros tenemos la obligación de devolver el importe al cliente 15 días después de la cancelación, pero antes tenemos que cobrarlo para poderlo devolver", explica Campos, quien apunta que en algunos casos está tirando de ahorros. También Rebeca: "Algunos clientes lo entienden, otros no tanto. Hay personas que por 300 euros han perdido las formas y se lo he pagado sin haberlo cobrado yo". Olmos señala que las compañías son tanto 'low cost' como generalistas y que no influye solo la empresa, sino también del destino. "Normalmente depende de la política de devolución de las empresas, pero también varía según las tasas del aeropuerto, por ejemplo, las de Estados Unidos son más difíciles de devolver", analiza Rebeca desde Ro Travel & Services.

Solo han podido reembolsar algunos pagos realizados por tarjeta de crédito. "Visa tiene un seguro para solicitar la devolución, pero se puede hacer solo si no han pasado 120 días desde la fecha de viaje y muchas veces ha transcurrido más tiempo", cuenta Campos. "No obstante, Visa espera cobrar ese dinero por parte del proveedor, si no es así, lo vuelve a cargar a la tarjeta", añade Ana. Esta agente de viajes, en el sector desde hace 17 años, agradece la comprensión de sus clientes: "El otro día me trajeron una caja de bombones para animarme".

"Nuestra mayor inquietud es devolver el dinero a los clientes. Ya no se habla de otra cosa, ni de los ocho meses que llevamos sin vender"

"Es una angustia moral. Nuestra mayor inquietud es devolver el dinero a los clientes. Ya no se habla de otra cosa, ni de los ocho meses que llevamos sin vender", aseguran desde Male. En verano han efectuado todas las reservas del año: un 8% respecto al curso pasado. En una situación similar se encuentran de 200 a 300 agencias de toda España, que se han unido y han contabilizado que las grandes compañías les deben unos 5.500 euros de media por agencia. Se han puesto en contacto con instituciones, como el Justicia de Aragón, que ha admitido su petición. "No podemos hacer frente a los reembolsos porque no son cantidades pequeñas", indica Rebeca Olmos, de Ro Travel & Services. Además, ambas agentes resaltan que la comisión que perciben no es alta: "De unos billetes de 800 euros, igual ganamos 50".

"No voy a cerrar porque esto es mi vida, tras 16 años de trabajo", confiesa Olmos. "Seguimos trabajando, espero 2021 con positivismo, organizando alguna propuesta", señalan en Ro Travel & Services con ilusión. Aunque a veces es complicado, tal y como sostiene Ana Campos: "Estoy trabajando dos veces, una para vender y otra para desvender, me quita energía".

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