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Alerta por calor: ¿qué temperatura máxima puede soportar el cuerpo humano?
No es lo mismo el calor seco que el calor húmedo, pero los expertos coinciden en que a partir de 55 o 60 grados se podrían producir graves problemas de salud.
En plena ola de calor, con máximas que pueden rozar o incluso superar la máxima alcanzada nunca en España de 47,6ºC, hay quienes se preguntan cuál es la temperatura máxima que puede soportar el cuerpo humano.
La doctora Teresa Cenarro explica que hay experimentos que dicen que hasta 120 grados en un corto espacio de tiempo el cuerpo humano puede resistir, si bien los expertos distinguen entre la temperatura interior y exterior. "Parece que entre 55 y 60 grados habría graves problemas de salud, aunque hay estudios que hablan de hasta 120 grados celsius, pero depende mucho del grado de humedad. No es lo mismo el calor seco que el calor húmedo. A 55 grados con humedad alta es mucho menos resistente el cuerpo humano que con baja humedad", señala esta doctora, que a modo de recomendación insta a la ciudadanía a seguir algunos consejos útiles y sencillos para evitar riesgos derivados del calor.
"Con estas temperaturas lo que está claro es que hay que intentar no salir a la calle o estar lo menos posible en ella y, desde luego, siempre muy bien hidratado, buscando la sombra. También evitar las piscinas a las horas centrales del día, porque aunque estés en el agua el sol está muy fuerte y la radiación solar también", alerta esta médica, que pone el foco en pacientes especialmente vulnerables, como las personas mayores, los niños pequeños y aquellos que tienen alguna enfermedad crónica, ya que temperaturas tan altas pueden desestabilizar su proceso crónico.
Del mismo modo, aconseja a la población tener "muchísimo cuidado" para evitar golpes de calor, e insta a "ofrecer mucha agua a personas mayores" o niños que no tienen el sentido de la sed como los adultos.
A su vez, insta a evitar hacer ejercicio con estas temperaturas tan altas, aunque sea a la sombra, porque "la pérdida de agua y electrolitos puede llevar a un golpe de calor" y sus consecuencias, e intentar estar en el "sitio más fresco posible", saliendo a la calle cuando la temperatura esté más baja: a primera hora de la mañana o a última de la tarde, "aunque realmente estos días es complicado", reconoce esta médica.
En los hogares, hay también medidas de sobra conocidas para evitar que el sol entre a las casas en las horas centrales del día, como bajar las persianas o hacer uso de ventiladores y aires acondicionados para mantener las viviendas "lo más frescas posibles".
Por último, en relación a la alimentación, los médicos aconsejan hidratarse mucho y cada poco tiempo y preparar comidas ligeras, como ensaladas y frutas que contienen mucha agua, evitando comidas copiosas que "hacen que el organismo tenga que gastar mucha energía, y lo que nos interesa es intentar que las células estén trabajando lo menos posible para no aumentar nuestra temperatura corporal", explica esta médica.
