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El viento aviva el fuego de Ateca, que avanza sin control tras calcinar 14.000 hectáreas
Más de 300 efectivos combaten las llamas, que hacen que sigan desalojados 1.700 zaragozanos. Pedro Sánchez garantiza ayudas y pide que la política medioambiental sea "cuestión de Estado".
El incendio de Ateca avanza sin control a merced del viento. Con 14.000 hectáreas quemadas y más de 1.700 desalojados, figura ya entre los peores fuegos registrados en la Comunidad, al nivel del que sufrió Luna (2015) y solo superado por el del Maestrazgo turolense (1994).
Al cierre de esta edición, más de 300 efectivos luchaban contra el fuego. Seguían desalojados Moros, Villalengua, Alhama de Aragón, Bubierca y Castejón de las Armas, y se mantenía el preaviso por riesgo en Embid de Ariza. Por la mañana también estaban alertados Cetina, Contamina, que finalmente no tuvo que ser evacuado pese a anunciarse el día anterior, Villarroya de la Sierra y Torrijo de la Cañada. El Gobierno duplicó este miércoles los efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME) asignados a Aragón, que son ya 208 y 34 vehículos. Colaboran en la extinción medios llegados de Castilla y León, como los cedidos por la Diputación y el Ayuntamiento de Soria, y de Comunidad Valenciana, y está previsto que hoy vengan más desde Navarra.
Un alivio moderado mostró el presidente de Aragón, Javier Lambán, en la reunión de la tarde para analizar la evolución del fuego. "Las previsiones más negativas no se han cumplido, por suerte", reconoció. Pero se mantiene el nivel de alerta 2, así como el protocolo de seguridad y de logística. "No doy nada por hecho ni por resuelto", enfatizó. Pues se espera que pasen al menos dos días hasta que se logre tener el incendio controlado. La situación es compleja, y hay varios fuegos en activo repartidos por todo el país. Lo reconoció Lambán, que advirtió de que "por desgracia, otras comunidades vecinas tienen problemas".
Hasta el puesto de mando de Ateca se trasladó Pedro Sánchez, para mostrar su reconocimiento al trabajo de los servidores públicos que se están "jugando la vida" en la lucha contra el fuego. El presidente garantizó que el Gobierno de España "se va a volcar" para que recuperen el "día a día" todas las localidades ahora afectadas. "Vamos a poner todos los recursos para poder recuperar estos parajes devastados por los incendios", subrayó. Y en plena ola de calor, y también de incendios, Sánchez invitó a afrontar el reto que representa la "emergencia climática" y a considerar las políticas medioambientales como "cuestiones de Estado".
Compartió con Lambán el llamamiento a la reflexión de la ciudadanía, pues en lo que va de año han ardido unas 70.000 hectáreas en España, más del doble de la media anual de los últimos diez años, y hasta este mes se han registrado once grandes fuegos, casi el doble de la media registrada en la última década. También aprovechó Sánchez para recordar que con el pago de impuestos "se fortalece el Estado del bienestar". Y que esos recursos facilitan a los equipos que luchan contra el fuego el material "para garantizar que hacen su trabajo de forma eficaz y segura".
Zona catastrófica
Aunque es imposible determinar aún los daños, el presidente de la Diputación de Zaragoza, Juan Antonio Sánchez-Quero, anunció que se ha solicitado la declaración de zona catastrófica para Moros, Villalengua, Alhama de Aragón, Bubierca y Castejón de las Armas para que las ayudas «lleguen lo antes posible» tanto para los ayuntamientos e infraestructuras afectadas como para los vecinos por las pérdidas en los bienes privados. Se mostró "profundamente" desolado por este desastre natural. "Ver tus montes, tus fincas y tu medio de vida en llamas causa rabia e impotencia", advirtió.
Aseguró Lambán que el Gobierno de Aragón respaldará la petición. Aunque reconoció que por ahora es "imposible" hacer una evaluación de los daños, y de las hectáreas afectadas. La prioridad para el Ejecutivo autonómico sigue siendo la seguridad de las personas y de los entornos urbanos. Y en ello tiene previsto seguir centrando todos los esfuerzos.
Preocupa Moros, por la difusión de imágenes en las que se ve fuego en las viviendas. Lambán explicó que estarían en el "extrarradio" y que "en lo sustancial" el casco urbano no se ha visto afectado. Manuel Morte, el alcalde, confirmó que el fuego había dañado una tubería principal y que la Diputación iba a suministrar agua hasta que sea posible repararla.
Protección frente a la ceniza
La ceniza y las llamas se dejaron sentir en varias localidades de la Comunidad de Calatayud. Incluso hubo municipios, como Monreal de Ariza, donde el Ayuntamiento "aconsejó" a los vecinos que permanecieran en sus casas con las ventanas cerradas. De manera oficial, no se recomendó ningún confinamiento. Aunque imperó el sentido común. "La gente suele ser responsable y cuidadosa con su salud", advirtió Lambán.
Pese a que la situación podía variar, pues, al cierre de esta edición, todo estaba a merced del viento, no preocupaba en exceso la situación de Ateca. Solo Embid de Ariza podía ser desalojado, y los vecinos estaban alertados. Desde el Gobierno de Aragón se pidió a los ciudadanos que sean "prudentes y cuidadosos", pues en los próximos días las circunstancia meteorológicas van a ser "peligrosas" y el incendio "no está resuelto".
Confiaban en que esta última noche fuera más tranquila que la anterior. Porque en la del martes, la situación experimentó un giro inesperado y muy peligroso. Tal fue así que se tuvieron que evacuar tres localidades más e intentar organizar, contra reloj, un dispositivo para poder acoger a los desalojados. Y se vivieron situaciones de caos.
Entre los reubicados en Calatayud había mayores que participaban en Alhama en un programa de turismo termal. A media tarde les permitieron regresar al hotel para recoger sus pertenencias y adelantar el regreso de las vacaciones frustradas.
Acompañado por el alcalde de Calatayud, José Manuel Aranda, el presidente del PP-Aragón, Jorge Azcón, visitó el recinto ferial donde permanecen unas 150 personas. El también alcalde de Zaragoza destacó cómo los bilbilitanos "se están volcando con los desplazados". Apuntó, no obstante, que cuando esto acabe "hay que abrir una reflexión sobre lo que tenemos que hacer todos para que estos incendios no vuelvan a ocurrir".
También Daniel Pérez Calvo, coordinador de Cs Aragón, de visita en Calatayud, instó a "fomentar las labores de limpieza en nuestros montes, pero no solo con el trabajo de las brigadas forestales, sino favoreciendo el pastoreo y la ganadería extensiva para que el ganado vuelva a nuestros montes y ayuden a prevenir incendios, evitando así que los bosques se conviertan en un peligroso combustible».
A las muestras de solidaridad se sumaron los obispos de las diócesis de Aragón que, preocupados por el incendio que está devastando la comarca del Alto Jalón, manifestaron su "afecto y cercanía a todas las víctimas". Pusieron a su disposición las iglesias y las dependencias parroquiales.
Equipos de psicólogos trataban este miércoles de reconfortar en Calatayud a quienes se vieron obligados a utilizar los espacios públicos porque les habían obligado a dejar sus viviendas. De manera puntual, les permitieron regresar a casa, acompañados por la Guardia Civil, para recoger algunas de sus pertenencias. Incluso hubo quien intentó quedarse, aunque desde la Administración les recordaron que el desalojo se mantiene, y no se sabe cuándo acabará.
El pabellón del recinto ferial bilbilitano recibió una gran cantidad de alimentos y bebidas para el desayuno y los voluntarios se encargaron de garantizar comida, merienda y cena. Funcionó, y muy bien, la red social y familiar de los afectados, pues la mayoría de los desalojados se fue rápidamente reubicando con sus allegados.
El operativo
En el operativo participaron unos 220 efectivos de la UME, además de 40 patrullas de la Guardia Civil, de Bomberos de la Diputación y del Ayuntamiento de Zaragoza, así como de los gobiernos de Aragón, Valencia y Castilla y León y de la Diputación de Soria y mañana se esperan también de la Comunidad foral de Navarra. El ministerio de Transición Ecológica aportó dos helicópteros medios (BRIF), dos aviones anfibios de media capacidad, un avión anfibio de gran capacidad, la BRIF de Daroca y una UMAP (unidad móvil de análisis y planificación).
Continuará este jueves la lucha sin cuartel con el fuego. Las temperaturas suben y el viento no rebla. Se sumarán más efectivos a la lucha sin tregua contra el virulento incendio.
