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Tortilla de patatas con... cinco ingredientes para 'tunear' la receta clásica
Aunque la fórmula de toda la vida, con o sin cebolla, es la que más aficionados concentra, las reinterpretaciones son ideales para romper la monotonía culinaria.
Cremosa por dentro, pero dorada y crujiente por fuera. La tortilla de patatas es un emblema de nuestra gastronomía y, si bien es cierto que (casi) todo el mundo conoce la receta, pocos son los que logran resultados dignos de ovación. Eso sí, solo hay que saber huir de los errores más comúnes a la hora de prepararla para disfrutar de un plato sublime al que, además, podemos dar un toque muy personal añadiéndole nuevos ingredientes. No obstante, conviene no perder de vista las tortillas de patatas que nunca haría un español para no volverse loco en los fogones y estropear esta delicia nacional que tantos debates nos regala a los comensales. Y es que, ¿es más rica con o sin cebolla?
Cinco recetas para 'tuenar' la tortilla de patatas
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1
Con queso de cabra
Hace dos años, el exconcursante de Operación Triunfo Luis Cepeda desvelaba en Twitter el ingrediente secreto de su tortilla de patatas: el queso de cabra. Y, lo cierto, es que la suma de este ingrediente le aporta a la receta original una textura cremosa muy agradable.
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2
Con calabacín y jamón serrano
Si junto a la patata se pochan unas rodajas de calabacín y, después, se agregan taquitos o lonchas de jamón serrano a la mezcla del huevo con las hortalizas, la tortilla tendrá más carácter y sabor. Eso sí, es recomendable no salar la tortilla si se quiere poder disfrutar del resultado.
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3
Con morcilla y pimientos
Haciendo una fritada de morcilla desmigajada con pimientos del piquillo y añadiéndosela a la patata cuando aún se están pochando en la sartén, lograremos una receta con acento aragonés. El único peligro de esta elaboración aparece a la hora de darle la vuelta a la tortilla. Debido a la densidad de la mezcla, es posible que la mitad de los ingredientes se queden por el camino. Por eso, lo mejor es humedecer ligeramente el plato que utilicemos para ayudar al huevo a escurrir con facilidad hasta la sartén.
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4
Con setas y gambas
Después de sofreír con una buena cantidad de ajos las setas y las gambas, hay que escurrir bien el resultado antes de incorporarlo a la mezcla de huevo y patatas. Si no lo hacemos, la tortilla nos quedará babosa y muy blanda, perdiendo textura y, probablemente, también sabor.
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5
Con chips de bolsa
Es la opción más rápida, aunque también la menos saludable. Eso sí, el resultado gustará a mayores y pequeños, y solo hay que volcar la bolsa en el huevo batido, ya salpimentado, y dejar que las 'chips' se empapen. Así, solo quedará seguir los pasos habituales para conseguir una delicia crujiente que sorprenderá a más de uno. En esta receta es mejor no añadir cebolla, pues acabará con el sabor de las patatas fritas de bolsa.