Francisco deberá hacer al menos tres cambios en el once para recibir al Valencia

De cara a la visita del Valencia de este domingo (20.45) en la que la SD Huesca se juega su continuidad en Primera División y tras el respiro en cuanto a las bajas de las últimas semanas, Francisco, el entrenador de la SD Huesca, se ve de nuevo ante el rompecabezas de conformar un once en el que al menos tendrá que realizar tres modificaciones respecto al que empató a uno en Villarreal en el anterior compromiso. Miramón ha recaído en su lesión del bíceps femoral de la pierna izquierda, y Pulido y Yangel Herrera están sancionados. Al margen de ellos tres, titulares en el Estadio de la Cerámica, Akapo ha sido operado esta semana e Insua hace tiempo ya que no está disponible, concretamente desde que se rompió los ligamentos en febrero en la visita al Girona.

El principal quebradero de cabeza se sitúa en el lateral derecho. Sin las opciones naturales para esa posición, Miramón y Akapo, y sin las alternativas que ha empleado el técnico almeriense en circunstancias similares recientes, Pulido y Herrera, lo más probable es que sea Ferreiro el hombre llamado para cumplir con ese papel. Ya lo hizo contra el Sevilla y el Getafe, y a lo largo de este curso también han sido empleado como interior, delantero y lateral izquierdo, mostrándose como un auténtico multiusos.

De todos modos, su posicionamiento junto a los defensas obligará a modificar el dibujo táctico. Entiende Francisco que aunque el gallego puede cumplir bien en esa labor, un rival como los valencianistas, caracterizado por sus rápidos ataques necesita de un posicionamiento en el que la zaga quede más protegida, aunque al mismo tiempo no puede renunciar a salir de frente a por la victoria, la comprometida situación en la tabla así lo exige.

Una pista para interpretar que es lo que puede hacer el preparador quizá se encuentre en el conjunto que conformó en la visita contra el Getafe de la jornada 27. Entonces, también había que hacer frente a varias bajas, de hecho en el banquillo se tuvieron que sentar los canteranos Uche y Javito, y Ferreiro tuvo que ocupar el lateral derecho. Con Mantovani, Etxeita y Galán completando la zaga, los mismo compañeros de baile que tendría ahora, Musto realizó las veces de un líbero que incluso llegaba a situarse entre los centrales si era necesario. Por delante se colocaron Herrera, que ahora podría ser sustituido por Rivera, Moi Gómez y Juanpi, y arriba formaron el ataque Gallego y Chimy Ávila.