zaragoza
Bancalé adquiere el bloque de oficinas de Aragonia por 20 millones a Zaragoza Urbana
El grupo aragonés ya le compró un año antes estos hoteles.
El grupo inversor aragonés Bancalé ha cerrado una de las mayores operaciones inmobiliarias de Zaragoza en el último año con la adquisición de Torre Aragonia, el bloque de oficinas del macrocomplejo diseñado por Rafael Moneo que incluye una galería comercial, pisos y el hotel Petronila. La compraventa con Zaragoza Urbana se formalizó a finales del año pasado por un importe cercano a los veinte millones de euros, aunque ninguna de las dos partes quiso dar a HERALDO detalles sobre la transacción.
El cambio en la propiedad se comunicó el pasado viernes a los inquilinos, a los que se detalló que la escritura pública de compraventa se formalizó el pasado 29 de diciembre. Esto supone que Bancalé Servicios Integrales se subroga en todos los derechos y obligaciones que se derivan de su condición de arrendador. Aunque el cambio en la titularidad tuvo efectos a 1 de enero, a las empresas que están como inquilinas se les ha notificado que las rentas se pagarán a la nueva propiedad a partir del próximo mes.
Torre Aragonia, a la que se accede por la avenida de Juan Pablo II, 35, cuenta con una superficie bruta alquilable de 10.000 metros cuadrados y aún tiene espacios disponibles. Este inmueble de 16 alturas dispone de una planta logística con posibilidad de espacios para almacén y cuartos técnicos.
Inquilinos
Los principales inquilinos son la energética Levitec, la tecnológica Everis (NTT Data), el distribuidor de polímeros Chemieuro, la operadora móvil aragonesa Embou y Regus. Esta última multinacional abrió en 2017 un centro de negocios de más de 900 metros cuadrados para oficinas. La planta que ocupa es una de las mayores de Torre Aragonia, la tercera, ya que la superficie de la mayoría alcanza los 680 metros, y cuenta con espacio para 47 despachos, una sala de reuniones, un ‘office’ y un área de ‘coworking’ dotada de seis escritorios. Además, también mantienen abiertas una oficina tanto la editorial Planeta como la tecnológica Microchip.
La adquisición del bloque de oficina de Aragonia no es la primera operación sellada entre Bancalé y Zaragoza Urbana. La empresa inmobiliaria, hotelera y de ocio, controlada por las familias Sanz Portolés y Barbany, ya le vendió a finales de 2021 dos de sus seis hoteles, el Alfonso I de Zaragoza y el Playa Victoria de Cádiz, a Bancalé por cerca de 55 millones. En este caso, su administración sigue en manos de la compañía zaragozana a través de su propia marca, Palafox Hoteles.
Esta compra con arriendo, muy habitual en el sector inmobiliario y conocida por su nombre en inglés ‘sale and lease back’, garantiza a la nueva propiedad la obtención de la renta acordada, que se pactó a largo plazo.
Con estos activos, Bancalé refuerza su cartera de activos en la capital aragonesa, volcada en el alquiler de naves en Plaza, que le ha llevado a convertirse en uno de los principales operadores privados. Y en ambos casos, tanto en el arrendamiento de oficinas como de hoteles, tiene amplia experiencia en España y en el extranjero desde que se constituyó hace dos décadas. En la capital también dispone de locales emblemáticos, como el que ocupa Massimo Dutti en Independencia, o la antigua sede del BBVA en el Coso, en negociación con varios operadores. Y en el antiguo convento frente al estadio promoverá una residencia de mayores con pisos tutelados asociados y otra para sanitarios.
El Sabadell pone a la venta los 132 apartamentos del complejo
A la venta de estos tres activos inmobiliarios a Bancalé se suma otra importante desinversión por parte de Zaragoza Urbana, la de las cuatro torres destinadas al alquiler de apartamentos con las que cuenta Aragonia. En este caso fue el Banco Sabadell el que se quedó con los 132 pisos en 2017, sin que haya trascendido la transacción que consta en el registro. Y ahora los ha puesto a la venta a travé de una inmobiliaria de la ciudad.
En su caso, tiene voluntad de permanencia porque el arrendamiento no forma parte de su negocio principal, aunque cuenta con una firma especializada, Vea Rental Homes Socimi, que es la titular de los pisos de Aragonia.
Fuentes del sector confirmaron que el Sabadell ha vuelto a poner los apartamentos en el mercado tras la fallida comercializó entre grandes inversores del país, que acometió antes del pasado verano. Si ahora se podrían adquirir por cualqueir interesado al venderse al por menor, entonces se intentó la venta en paquete por un importe que oscilaba entre 27 y 29 millones.
Esta entidad financiera fue precisamente una de las cuatro que aportó la financiación necesaria para construir Aragonia, que suma una superficie de 197.000 metros cuadrados sobre un solar rectangular de poco más de un hectárea. Y de la misma forma, el Sabadell pactó la refinanciación de la deuda de Zaragoza Urbana hace tres años, que incluía como garantía la desinversión de activos.
Las citadas fuentes del sector incidieron en que Zaragoza Urbana se ha desprendido de varias de sus propiedades señeras para lograr liquidez, ya que acumula un millonario pasivo y la pandemia lastró aún más sus cuentas como consecuencia de las restricciones a la actividad impuestas. Y lo que era ineludible era atender sus compromisos de pago con las entidades financieras. Como informó HERALDO, la última información no financiera de Zaragoza Urbana se remonta a 2020 y, como se puede comprobar en su web, hizo constar como objetivo del grupo a medio plazo la consolidación de las altas inversiones realizadas en los últimos quince años, "ajustando su patrimonio al equilibrio financiero". La plantilla alcanzaba entonces las 412 personas.
