gastronomía

Empanadas recién hechas y otras viandas gallegas en el paseo de la Independencia

Una pareja ofrece en el centro de Zaragoza distintos bocados dulces y salados de la 'terriña', incluido el célebre pan, desde la 'Casa das empanadas'.

Mario, en la 'Casa das empanadas' de Zaragoza.
Mario, en la 'Casa das empanadas' de Zaragoza.
Oliver Duch

La gastronomía gallega es una de las más valoradas dentro de un sector ya de por sí potente en España. Une la mayor variedad de marisco y pescado con carne de primera calidad y un correcto uso de los alimentos que brotan de la tierra. En resumen, que lo tiene prácticamente todo, hasta uno de los panes más célebres de todo el territorio nacional por su textura y sabor. Y, al menos sobre el terreno, unos precios todavía competitivos.

Sin embargo, fuera de la 'terriña' y de Madrid no es fácil encontrar negocios que ofrezcan una verdadera oferta de productos de la comunidad del noroeste peninsular: en las ciudades aragonesas, por ejemplo, no abundan las marisquerías ni las tiendas especializadas en esta gastronomía. Por eso es una alegría la apertura de la 'Casa das empanadas', en la entrada de 'El Caracol' desde el paseo de la Independencia de Zaragoza.

La tienda está impulsada por Mario Jiménez y Verónica Carbonell, de Albalate del Arzobispo y Utebo. Lleva abierta apenas una semana y ya está funcionando a pleno rendimiento. "Los productos estrella son, sin lugar a dudas, la quesada gallega y la empanada, claro", cuenta Mario.

Las empanadas se hacen al momento y por encargo. Nada de largas esperas en el mostrador. "Vamos haciendo las masas y estas van fermentando -explica el repostero-. Desde que la piden hasta que está terminada apenas pasan unos veinte minutos. Las vendemos enteras (son redondas, de unos cuarenta centímetros de diámetro) o por mitades".

También tienen a la venta porciones de distintos sabores que van reponiendo cada poco rato. Hay una gran variedad de rellenos disponibles: de zorza, de pollo, la clásica de atún, al estilo marinero o de carne. "Más adelante incluiremos otros ingredientes, como el pulpo o las zamburiñas", aclaran los propietarios, que también dispensan el clásico pan gallego, que resulta ligero y esponjoso, tanto en forma de barra como en hogaza.

La sección dulce tampoco pasa desapercibida en el local y en el escaparate. Verónica y Mario venden la clásica tarta de Santiago, pero también rosco gallego (parecido a las rosquillas), tarta Larpeira, bomba gallega, tarta de queso con arándanos, tarta de manzana y la citada quesada.

Además, en la tienda hay una selección de productos de origen gallego. Los clientes pueden comprar desde mallas de patatas hasta chorizos ahumados picantes, pasando por mieles, vino albariño o dos tipos de aceite.

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