gastronomía

Restaurantes y bares aragoneses a pie de carretera que merecen un alto en el camino

Una veintena de negocios de las tres provincias han sido reconocidos con un 'solete de carretera' de la Guía Repsol.

Jesús Almudí, del restaurante Espliego de Villamayor de Gállego
Amparo Anadón y Jesús Almudí, del restaurante Espliego de Villamayor de Gállego
Francisco Jiménez

En su línea de lanzar propuestas gastronómicas cada poco tiempo a través de nuevas categorías, la Guía Repsol ha puesto sobre la mesa los 'soletes de carretera', que ponen en el mapa esos bares y restaurantes cercanos a las vías que atraviesan el país y que aúnan una serie de cualidades: su propuesta gastronómica bien merece un alto en el camino, el ticket medio es asequible y el ambiente en su interior es agradable y se aleja del cliché.

La famosa guía desliza una veintena larga de bares y restaurantes en las inmediaciones de varias carreteras que cruzan Aragón. En la provincia de Zaragoza, por ejemplo, destaca el Gastrobar Espliego, en Villamayor, del que se dice que "trabaja bien la brasa hasta en el postre". En la carta tienen platos para picar, pero también preparaciones más serias para detenerse un buen rato.

En la provincia de Huesca, los inspectores subrayan con boli rojo el nombre de 'El Cierzo' (Binéfar), donde destacan bocadillos como el de salmón, anchoas, queso fresco, tomate y aguacate. Por último, en el trazado de la A-23 brilla un local turolense. Se trata de 'La Vía Verde', ubicada en Sarrión. "Solo hay que dejarse llevar hasta su chuletón de vaca gallega, su arroz de bacalao y su leche asada", destaca la guía.

Provincia de Huesca 

Pero en todas las provincias hay muchas otras propuestas que aguardan a pie de carretera a ser descubiertas en una escapada primaveral o veraniega. En la de Huesca hay un total de nueve recomendaciones más: en Benabarre se encuentran el ARP, el bar de Las PiscinasChocolates Bresco. En Arén está Can Rocamora y en Fiscal, el Asador de Fiscal. Hay más: hostal Isidro en Puente de Montañana, La Carrasca (Aínsa), el Tiki Bar de Biescas y La Trastienda del Trasiego (Barbastro).

Este último, conocido como el local de tapas del exitoso 'Trasiego', ofrece croquetas, gyozas, bravas, carne a la brasa o calamares, también una notable tortilla cremosa de guiso de setas y jugo de cebolla DO Fuentes. Además, dispone de una amplia oferta de vinos del Somontano. 

Provincia de Zaragoza

A lo largo y ancho de la provincia de Zaragoza hay cinco locales frente a los que merece la pena dejar aparcado el coche. Son El Español (Bujaraloz), Fonda Rubio (Muel), Nobelty by Lorenzo (Utebo), Área 280 (Calatorao) y el citado Gastrobar Espliego.

En el local de Muel trabajan de maravilla la verdura de su huerta, que solo cocinan con aceite de sus propios olivos. El vino siempre es D.O Cariñena y combinan el servicio de menú del día con la organización de eventos. Por su parte, el establecimiento de Utebo es una casa de comidas en la que se combinan los productos de proximidad con diferentes culturas gastronómicas del mundo.

Provincia de Teruel

Al sur de la Comunidad brillan los soletes de carretera de Cielo Mudéjar (Teruel), El Azafrán (Caminreal), Fonda Alcalá (Calaceite), La Consolación (Monroyo), La Vía Verde (Sarrión), Lo Molí (Calaceite), Posada Guadalupe (Monroyo) y bar Las Eras (Alcañiz).

De este grupo destaca la Fonda Alcalá, que ofrece cocina aragonesa, recetas heredada de padres a hijos y una carta muy cuidada y variada con referencias como las judías con arenque. También Lo Molí, que atesora patés vegetales artesanales y un menú de una calidad extraordinaria con postres caseros, o Cielo Mudéjar, en el que hay que probar el roast beef de solomillo de ternera en salsa de champiñones, el tatin de manzana con foie a la plancha y la tarta de queso con mangos flambeados.

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