El sector textil aragonés reclama su propio Perte para afrontar los retos de la economía circular

Las empresas aragonesas cierran un 2021 complicado por los problemas de suministro y los precios de las materias primas.

Nacho Lamar se hizo en 2021 con el premio nacional de moda
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Francisco Jiménez

La Federación de Industrias Textiles y de la Confección de Aragón (Fitca) se ha sumado a otros representantes del sector en España para reclamar al Gobierno su propio Perte (Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica), un paquete económico de fondos europeos que -afirman- es neccesario para poder hacer frente a los retos derivados de la economía circular que se quieren imponer como una práctica generalizada en Europa.

Fitca ha convocado para el próximo martes, día 22, a las empresas del sector en Zaragoza a una sesión informativa en la que Luis Aparicio, su presidente, explicará con detalles el contenido del Perte que reclaman. Una cita a la que acudirá Carmen Torres, secretaria general de Moda España, que podrá responder a las dudas que se planteen.

"Ante el impacto de la pandemia y la reciente crisis de precios de la energía, los problemas de abastecimiento de materias primas y distribución, lo que se pretende con el Perte específico del sector es que permita a la industria textil mejorar en su competitividad y afrontrar los retos que marca la UE", apuntaron este viernes a este diario fuentes de Fitca. Entre esos retos precisaron que está "la adopción de un modelo de industria 4.0 y de economía circular, la articulación de un sistema colectivo de gestión de residuos que nos permita adaptarnos a la nueva legislación y ser palanca de la economía circular en el sector textil y moda de España".

Para lograr esos objetivos, precisaron, plantean la articulación de ayudas para la mejora de procesos y métodos de fabricación; también para el desarrollo de nuevas materias primas con bajo impacto; para proyectos de I+D+i capaces de potenciar la circularidad y la digitalización; para mejorar los modelos comerciales e industriales de las pymes; para la implantación de la industria 4.0 en el sector, y para nuevos modelos energéticos, logísticos e instrumentos de capacitación.

Para alcanzar estos objetivos se ha creado el Observatorio del Textil y Moda, un entidad creada por parte del Consejo Intertextil Español y la Confederación ModaEspaña, a la cual Fitca, a través de la Federación Nacional de Empresas de Confección, se encuentra adscrita. El Observatorio lo lideran Adriana Domínguez (de Adolfo Domínguez) y Juan Parés (Textil Santanderina) en representación de toda la cadena de valor, desde las pymes hasta las grandes empresas.

Según indicaron desde Fitca, el apoyo de un Perte puede ayudar a aliviar los problemas que el sector tuvo en 2021 después de que tras un 2020 donde muchas empresas trabajaron para cubrir las necesidades puntuales de artículos textiles para sanidad, las restricciones comerciales se tradujeron en la acumulación de ‘stock’ tanto en los almacenes de los confeccionistas como en el ‘retail’, en los mismos comercios, lo que dio lugar a un elevado nivel de impagos.

Balance de 2021

Una encuesta de asociados de Fitca a finales de 2021 reveló que fueron muchas las empresas que atravesaban una complicada situación derivada de los precios de la electricidad y de las materias primas y de los problemas de suministros. "Cabe destacar que no estamos hablando solo de Asia sino de otros puntos de Europa como Alemania e Italia", indicaron este viernes.

"La mayor parte de las empresas han notado retrasos en materias primas, sobre todo de las que tienen procedencia asiática, de más de dos meses -que son la mayoría ya que, aunque se hagan en Europa algunos procesos, las materias primas de la mayor parte de los proveedores suele venir de Asia (empesas, productos químicos para tintes, etc.)-, además de un notable incremento en los precios", señalaron desde Fitca.

Las empresas aragonesas, pese a todo, han realizado inversiones productivas y de digitalización en 2021, gracias fundamentalmente -señalaron- a las ayudas para los sectores textil-confección y calzado creadas por la DGA atendiendo a las peticiones tanto de la organización empresarial de calzado como de Fitca, que contaron con un presupuesto global de 300.000 euros.

El sector aglutina a unas 400 empresas industriales en Aragón, que facturan más de 200 millones de euros y dan empleo estable a más de 2.000 trabajadores.

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