Real Zaragoza

Real Zaragoza

Un fondo de armario muy mermado

Las lesiones y la falta de ritmo de algunos jugadores limitan las alternativas de Víctor dentro de la plantilla.

Partido Real Zaragoza-Fuenlabrada
José Miguel Marco | TONI GALAN

La exigencia de la Segunda División española requiere plantillas con fondo de armario consistente. La igualdad y duración de la competición, que va más allá de las 42 jornadas en caso de disputar el ‘play off’ por el ascenso, implica la necesidad de disponer de un buen número de efectivos que sumen, y en el Real Zaragoza esta particularidad se está viendo afectada en los últimos encuentros por las múltiples lesiones y la falta de ritmo de algunos jugadores. 

Una contractura llevó a Shinji Kagawa a pedir el cambio en el partido contra el Fuenlabrada, obligando a Víctor Fernández a dar entrada a un Álex Blanco que, aunque se implicó en labores defensivas y participó en varias jugadas de peligro, exhibió un nivel alejado de ser un futbolista diferencial hacia la victoria. 

Como el resto del equipo, acusó la inestabilidad del centro del campo en una tarde en la que Raúl Guti e Íñigo Eguaras se mostraron desbordados e imprecisos, hasta el punto de que Víctor Fernández buscó la reacción en el fútbol de un Dani Torres que, ni mucho menos, mejoró las prestaciones de sus compañeros en la recta final del choque. 

El ex del Alavés anduvo lento en las coberturas y errático en la entrega. Alejado de lo que precisaba el encuentro, si bien el banquillo tampoco ofrecía muchas más soluciones.

James Igbekeme no pudo ejercitarse con normalidad a lo largo de la semana a causa de unas molestias musculares y, a pesar de incluirle en la convocatoria, Víctor prefirió no arriesgar con su entrada al campo. De hecho, el entrenador zaragozano ni siquiera decidió agotar los tres cambios reglamentarios, evidenciando una vez más su falta de confianza en Linares. 

Por ello, es importante que el otro referente ofensivo, el recién incorporado André Pereira, supere cuanto antes sus dolencias musculares -no entró en la convocatoria al no haberse entrenado durante la semana- y se ponga a tono para aportar alternativas hacia el gol. 

Ahora mismo, la figura del portugués dista bastante de lo que se entiende por revulsivo. Acusa la inactividad, la falta de verdadero ritmo competitivo. Todo lo contrario que Jawad El Yamiq, cuyo rendimiento ha sido inmediato. En su precipitado debut en Cádiz ya exhibió las cualidades -desplazamiento en largo, rapidez al cruce, solvencia e intensidad en la marca- que repitió frente al Fuenlabrada. 

El central marroquí se está afianzando en el eje de la zaga en detrimento de Pichu Atienza, otro de los afectados por la plaga de lesionados que asola al conjunto maño en las últimas semanas. Sufrió un esguince de tobillo en el calentamiento en el Ramón de Carranza y, aunque fue citado anteayer, Víctor no lo sitió en el once titular. 

A todo ello, hay que sumar la conocida baja de larga duración de Javi Ros. El Real Zaragoza ya le busca sustituto en su afán de robustecer una plantilla en la que todos deben aportar hacia el tramo crucial de la competición.