El Real Zaragoza preparará un anteproyecto de estadio para el concurso de la nueva Romareda

El Real Zaragoza se va a implicar en el proyecto del nuevo campo de fútbol de La Romareda. Esta es la previsión del club, siempre y cuando la evolución del proyecto avance hacia un modelo viable en su explotación y financiable en todo lo referido a las inversiones necesarias para construir una infraestructura con capacidad de ser una de las sedes del Mundial 2030, siempre que lo organicen España, Portugal y Ucrania. Y para empezar a hacer números, la sociedad anónima deportiva preparará un anteproyecto con el que concurrir al concurso público que permitirá adjudicar la explotación y las obras.

El club declinó ayer hacer valoraciones oficiales más allá de avanzar que "se va a implicar", aunque habrá que esperar a que se licite el estadio. Se remitió además a las palabras del consejero delegado del club, Raúl Sanhellí, que el martes, en la presentación del nuevo entrenador, Fran Escribá, afirmó que el club "esta completamente involucrado" en el proyecto. "Estamos en conversaciones con el Ayuntamiento en todos los pasos y en coordinación. Hablando con el equipo de arquitectos y con todo el mundo. Somos parte del proceso", afirmó.

Al mencionar a los arquitectos, dejó caer que el Real Zaragoza tiene en mente un anteproyecto de estadio, que será la base para definir la viabilidad de la explotación y sus oportunidades de financiación. Además, se incorporará a la oferta que presente al concurso público que convocará el Ayuntamiento en el primer semestre de 2023, previsiblemente antes de las elecciones, según explicó el alcalde el martes en su intervención en el debate sobre el estado de la ciudad. El club, según fuentes consultadas, podría tener lista una primera propuesta de estadio a principios del año próximo para redactar un proyecto de ejecución si finalmente gana el concurso. El Ayuntamiento siempre ha dicho que para la licitación del estadio se exigirá la presentación de un proyecto y se impedirá por ejemplo la venta a terceros.

Pero para que todas estas cuestiones se sustancien, en primer lugar el Ayuntamiento de Zaragoza debe aprobar la modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) el próximo día 21 de noviembre en la comisión de Urbanismo y, posteriormente, en el pleno del día 29.

Se trata de una modificación que permitiría sumar más de 20.000 metros cuadrados de los usos terciarios existentes en una pastilla de terreno situada junto al campo de fútbol, al lado de la plaza de Eduardo Ibarra (en total hay 42.500 metros cuadrados edificables). La otra mitad serviría, tras su enajenación, para financiar el proyecto de recuperación del Huerva.  Según explicó el alcalde Azcón, en el marco de las conversaciones que se están manteniendo con el Real Zaragoza, el club consideraría suficientes esos usos terciarios para construir el nuevo estadio a cambio de la explotación durante una serie de años.

La fórmula del derecho de superficie, por la que el adjudicatario se hace con la propiedad de un bien patrimonial durante un periodo de tiempo, se perfila como la más viable para sostener el modelo de financiación del campo. Es una solución, que tiene antecedentes en la ciudad como el de la residencia que está actualmente en construcción en Pontoneros, que permite periodos de explotación más prolongados y facilita el acceso a financiación.