El tráfico se desploma un 78% en Zaragoza tras el parón de las actividades no esenciales por el coronavirus

La suspensión de toda actividad no esencial aprobada por el Gobierno central esta semana ha agudizado la caída del tráfico rodado que cada día circula por las calles de la capital aragonesa. Si tras el decreto del estado de alarma del 14 de marzo el paso de vehículos descendió un 65%, desde el lunes los puntos de control que el Ayuntamiento tiene instalados por las principales vías de la ciudad constatan que ahora se ha desplomado hasta el 77,8%. Y aún bajará más, porque en esos datos no se refleja la reducción a la mitad del servicio del bus urbano que se estrenó ayer.

En concreto, los 29 sensores que el área de Movilidad tiene distribuidos por Zaragoza captaron el miércoles 145.034 vehículos (se trata de una suma acumulada, ya que cada uno ha podido quedar registrado en más de un punto de control), mientras que hace un mes la cifra ascendió a 652.797. En la actualidad, los coches y motos privados suponen el 62,5% de la circulación que, pese a las restricciones y al confinamiento, todavía tienen que hacer desplazamientos por la ciudad. Además, el reparto de mercancías representa el 15,2%, frente al 10,1% del taxi, el 9,5% del bus y el 1,5% de servicios de emergencias como Policía, Bomberos, ambulancias...

En lo que respecta al transporte público, el Gobierno central instó el lunes a las administraciones locales a una reducción del servicio, de tal forma que se mantuviera a diario el que habitualmente se presta los fines de semana. En la práctica, eso supone recortar a la mitad el paso de vehículos, una medida que el Ayuntamiento de Zaragoza ya había tomado con el tranvía, ante el desplome de usuarios -a cambio se utilizan convoyes dobles para garantizar el distanciamiento de los viajeros- y este miércoles hizo lo propio con el bus urbano.

Durante la mayor parte del día circularon 147 buses, pero el Ayuntamiento apuntaló el servicio en las horas punta -de 5.00 a 9.00 y de 13.00 a 16.00- de forma que en esos periodos se llegó a 213 vehículos. Desde el área de Movilidad señalaron que estos refuerzos "funcionaron razonablemente bien, incluso en algunos casos mejor que en días anteriores". En cualquier caso, para evitar que una reducción tan drástica del servicio impidiera a los usuarios respetar el distanciamiento social, los inspectores municipales y los de la empresa concesionaria, Avanza, se desplegaron por los puntos de mayor demanda prevista.

Desde el Consistorio aseguraron que tan solo registraron una acumulación significativa de viajeros en una parada de la línea 42, donde algunas personas tuvieron que quedarse en tierra, aunque según fuentes municipales, el siguiente bus tan solo tardó 4 minutos en llegar.

Los portavoces del comité de empresa, en cambio, criticaron la "falta de coordinación" de este primer día de recortes, en palabras de su presidente, José Manuel Montañés, del sindicato Sattra, que confió en que a partir del lunes «haya mejor organización». Por su parte, desde el CUT consideraron «insuficientes» las frecuencias y reclamaron reforzar también el horario de 19.00 a 23.00.

9.500 usos diarios de sanitarios

En cualquier caso, el transporte público de la ciudad mantiene un histórico descenso de usuarios. Al bus se suben a diario casi 290.000 viajeros menos que hace un año. En concreto, el primer miércoles de abril de 2019 utilizaron este servicio 321.809 personas, frente a las 25.936 del pasado día 1, es decir, un 91,1% menos. Y en el tranvía la situación es incluso peor, ya que los convoyes transportan a un 95,3% menos de ciudadanos.

Y eso que el Ayuntamiento y Avanza ofrecen desde el 24 de marzo viajes sin coste en el transporte público al personal sanitario de los hospitales y residencias de mayores. Movilidad estima que cada día se registran unos 9.500 de estos usos gratuitos.

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