Sarrión cuenta desde este jueves con el único museo de la trufa en España. El centro, que ha necesitado de una inversión de 620.000 euros, ha abierto sus puertas con el objetivo de reforzar la fama mundial que la localidad turolense se ha ganado como cuna del cultivo de este hongo.

El museo, bautizado como ‘Tuber universum’, gira en torno al mundo de la trufa. A través de paneles informativos y dispositivos interactivos, permite conocer cómo es el cultivo, la recolección, la transformación y la venta de este producto que ha cambiado el futuro de la localidad.

El visitante se encuentra, nada más cruzar la puerta, con una vitrina que contiene tierra de Sarrión. Se trata de un sustrato árido y pedregoso poco apropiado para la agricultura tradicional, pero muy bueno para la trufa. Las esculturas de dos enormes hongos cuelgan del techo decorando la sala principal al tiempo que hacen de soporte de sendas pantallas electrónicas en las que aparecen las características de la trufa negra y la blanca, dos de las más de 70 especies de trufa que existen.

Los antiguos utensilios para la recogida del hongo son también protagonistas del centro, que dedica un espacio sensorial para aprender a distinguir el verdadero aroma de la trufa del olor químico que incorporan algunos productos de alimentación que se promocionan como elaborados con este hongo.

El museo, cuya entrada cuesta tres euros, tiene un pequeño bar y una zona en la que el propietario del restaurante de Sarrión ‘La vía verde’, Rubén Gracia, junto a su jefe de cocina, Eduardo Navarro, elaboran en directo trufa laminada en aceite de oliva virgen del Bajo Aragón, crema de trufa con queso de cabra o croquetas de jamón trufado. En temporada de recolección, de otoño a primavera, será posible comprar trufa fresca en el centro, que ya vende productos elaborados con este hongo.

Fotos de la inauguración del centro de la trufa en Sarrión (Teruel)

“Hacía falta un sitio así en España para conocer la trufa”, ha manifestado la alcaldesa de Sarrión, Estefanía Doñate, que ha ejercido de anfitriona en la inauguración del museo. Con 1.200 vecinos, el municipio ha experimentado una gran transformación desde que hace medio siglo los primeros truficultores, a los que tildaron de “locos” por dedicarse a este cultivo, empezaran a comercializar este hongo.

"Los diez primos hermanos nos hemos quedado"

“En mi familia somos 10 primos hermanos y todos vivimos aquí”, ha resaltado Doñate. “La gente se queda en Sarrión porque la truficultura permite un buen nivel de vida”, ha añadido. La alcaldesa ha relatado que hace medio siglo “aquí no había nada de lo que vivir, pero la trufa lo cambió todo, porque hoy hay gente que en sus plantaciones tiene hasta 20 personas trabajando en campaña”. “En el pueblo, tenemos colegio completo y ya estamos hablando con el Gobierno aragonés porque la escuela infantil se nos ha quedado pequeña; son buenas noticias para este mundo rural”, ha subrayado.

La cinta inaugural ha sido cortada por Ana Muñoz, la subdirectora de Desarrollo y Sostenibilidad Turística en la Secretaría de Estado de Turismo en Madrid, quien ha anunciado que el museo, motor de desarrollo en la zona, formará parte de un plan de sostenibilidad turística que pretende atraer visitantes del norte de Europa y recibirá apoyo económico para que desde él se siga impulsando la trufa.

El Ministerio de Comercio y Turismo ha aportado 610.000 euros a la construcción y acondicionamiento del centro de interpretación, proyectado hace ocho años, mientras que la Diputación Provincial de Teruel ha puesto los 20.000 euros restantes. Sarrión ha sido elegida como sede del museo por ser pionera en el cultivo de la trufa dentro de la provincia de Teruel, donde se recolecta el 80% de la trufa de España que se exporta a otros países. Junto al centro se ha acondicionado una plantación trufera que permitirá a los visitantes conocer el origen de este curioso hongo que alcanza en el mercado precios astronómicos, de hasta 1.500 euros el kilo.

El presidente de la Diputación Provincial de Teruel, Joaquín Juste, ha resaltado que ‘Tuber universum’ es “un ejemplo de la colaboración entre administraciones” y ha augurado que “será un éxito”. A ello contribuirá, ha explicado, la consecución, ya muy próxima, de la Indicación Geográfica Protegida (IGP) para la trufa negra de Teruel. “Será un antes y un después para la provincia”, ha dicho Juste, quien ha recordado que “antes, el que tenía dinero en Sarrión compraba una hectárea de naranjos en Valencia y se iba, pero ahora es al revés, los de Valencia suben a comprar terreno aquí”. “Y es que en Teruel también se puede emprender y tener éxito”, ha añadido el presidente de la Diputación.