Los alcaldes de las tres capitales urgen "a devolver cuanto antes las cantidades perdidas"

¿Qué supone perder ahora la recaudación de la plusvalía?

Un varapalo tremendo. Es el segundo impuesto en recaudación en el Ayuntamiento. La previsión que había en 2022 era de 45 millones de euros. Toda la política de Acción Social son 58 millones. Necesitamos una solución.

¿Y qué solución se le puede dar?

Tiene que haber una normativa que sustituya la que el Constitucional ha declarado nula y tiene que ser urgente. Es más, el Gobierno ha perdido el tiempo. Y es necesario un fondo por parte del Gobierno que compense la pérdida.

¿De cuánto?

A día de hoy es difícil de calcular. Pero sí se ha estimado una cifra de alrededor de 2.500 millones de euros en toda España. La FEMP ha pedido un fondo que compense todas las pérdidas, las que ya hemos tenido en el pasado y las que van a haber sí o sí en el futuro.

¿Qué supondría para Zaragoza?

Si hay 47 millones de españoles, somos 700.000. Pero cuanta más actividad económica hay, más peso tiene la plusvalía. Hay municipios en los que supone el 2%, y en el nuestro es casi el 6%.

El PP ha defendido en varias ocasiones suprimir este impuesto. ¿Esta es la ocasión?

Podría serlo. Pero no creo que el Gobierno de España tenga capacidad para hacerlo.

¿Por qué?

Este impuesto es injusto, especialmente en la plusvalía mortis causa. Sería una buena idea suprimirlo, pero no creo que el Gobierno de España lo vaya a hacer, porque significaría una reforma integral de la financiación local.

¿Para crear otro impuesto?

No, yo no pediría una mayor capacidad impositiva, sino una mayor participación en los ingresos de la Comunidad autónoma, que es de la que estamos asumiendo las competencias impropias.

¿Son posibles unos presupuestos con 45 millones menos?

Es imposible. Sería inaceptable hacer unos presupuestos con 45 millones menos. Tenemos que reclamarle al Gobierno de España que esa solución no llegue nunca.

¿Ha valorado subir otros impuestos para compensar lo que se pierda por plusvalía?

En Zaragoza ahora no se suben impuestos. Se subían cuando gobernaba la izquierda. Nuestra idea es bajarlos. Subir los impuestos no crea soluciones, las agrava.

¿Qué incidencia tiene en Huesca dejar de liquidar la plusvalía?

Esta sentencia afecta a una recaudación importante de las corporaciones locales de toda España (1,5 millones de euros en Huesca), lo que urge al Estado a garantizar que no haya una pérdida de recursos sobre todo el periodo en el que estamos, elaborando presupuestos para 202 . Además, debe garantiza la normativa para conceder seguridad jurídica a los ayuntamientos y los contribuyentes en ese proceso.

¿Van a pedir compensaciones por la pérdida de ingresos?

Sí. Necesitamos que se nos compense esa pérdida recaudatoria, que no es imputable a los ayuntamientos porque fue el legislador el que fijó los criterios de ese impuesto. Necesitamos que el Estado nos dé recursos suficientes para elaborar los presupuestos de 2022. La FEMP debe ser interlocutor con el Estado, no los ayuntamientos de forma individual.

¿Se modificarán partidas en el presupuesto de 2022?

Los que ya teníamos un calendario tendremos que esperar a conocer la cuantía que el Estado, de alguna forma, va a reponer a los ayuntamientos porque sin saberlo tenemos problemas para elaborar el presupuesto. La merma es importante y nos dificultaría mucho cuadrar las cuentas, por lo que exigimos que esa cantidad se reponga cuanto antes.

¿Demuestra esto que hay que contar con una financiación local menos vulnerable?

Tiene que fijarse un ritmo idéntico al que hay entre el Estado y las comunidades autónomas porque si no, llegamos tarde a las cuentas estatales. Además, en las Cortes de Aragón se debate una nueva norma presupuestaria para que el Gobierno autonómico incremente de 600.000 a un millón la financiación de Huesca. Llevamos dos años y pido a los grupos rapidez en la tramitación.

¿Está bien planteado el impuesto de plusvalía?

Primero hay que fijar bien la base jurídica. Y los parámetros para definirlo tienen que ser claros para la administración local y el contribuyente, para no dar opciones a los recursos.

¿Qué previsión de ingresos tenía el Ayuntamiento de Teruel para 2022 con cargo al impuesto de plusvalías, que ahora peligra?

La misma que en 2021, 800.000 euros. Pero en 2021 hemos paralizado el cobro a raíz de la sentencia cuando llevaba acumulados 600.000 euros. Supone el 5% de los ingresos por impuestos directos. Es una cantidad importante.

Si, finalmente, el impuesto desaparece, ¿cómo va a compensar el agujero financiero?

Quiero señalar que en Teruel nadie paga plusvalías por heredar –la bonificación es del 95%– o si vende inmuebles con pérdidas. Me preocupa el impacto que pueda tener la supresión de este impuesto en 2022, pero de situaciones peores ha salido este equipo de gobierno, como cuando en 2011 al Ayuntamiento le cortaron la luz porque debía 60 millones de euros, nueve de ellos a proveedores. Pero no se trata de que los alcaldes tengan que pensar en cómo ajustan el presupuesto como consecuencia de la eliminación de las plusvalías sino de que el Gobierno dé una solución rápida a este asunto. Y es posible.

¿Por dónde pasa la solución?

En 2018, el entonces gobierno del PP, ya inició el trámite para revisar un impuesto con muchos problemas legales tal como está concebido. Es un problema que se veía venir y no se ha hecho nada por resolverlo hasta que ha estallado. Se trata de modificar la base imponible. No es tan difícil. Si lo busca, el Gobierno encontrará un acuerdo político para sacar adelante la modificación.

¿Qué urge más, modificar la normativa o compensar el dinero que se dejará de ingresar?

Hay que buscar una solución mixta, que pasa por adaptar la legislación rápidamente y compensar a los ayuntamientos por la pérdida de ingresos que acumula este tributo. Pero soy escéptica porque los ayuntamientos llevamos tiempo reclamando al Gobierno fondos por la covid y no han llegado.

¿Hay tiempo de reformar la normativa para que entré en vigor antes del 1 de enero de 2022?

Hay tiempo de sobra. Podría resolverse en la trámite de los Presupuestos de Estado de 2022.