MÚSICA
Qué ver en los alrededores del Festival Pirineos Sur
La trigésima edición de Pirineos Sur es la excusa perfecta para ver a grandes artistas nacionales e internacionales y, de paso, descubrir las maravillas que recoge el Pirineo aragonés.
El festival Pirineos Sur lleva treinta ediciones avivando el territorio que rodea Sallent de Gállego a ritmo de grandes artistas del panorama nacional e internacional. Por eso, aprovechar el festival al máximo incluye visitas obligatorias por el Pirineo aragonés.
En Lanuza, su escenario flota sobre el agua que el embalse recoge del Río Gállego. Unas vistas dignas de enmarcar y desde las que vislumbrar las aguas cristalinas del río con las montañas pirenaicas de fondo. Esas imponentes vistas desde los escenarios de Lanuza y Sallent de Gállego son el preámbulo a todo lo que puedes encontrar en las localidades y el territorio cercano.
Qué ver en Sallent de Gállego
A parte de los paisajes característicos del Pirineo de los que puede presumir el municipio, Sallent de Gállego esconde curiosas maravillas entre sus calles, como El Gigante de Sallent. Fermín Arrudi se ganó su estatua a tamaño real junto al ayuntamiento hace décadas. ¿Por qué recalcar ‘a tamaño real’? Porque Arrudi llegó a medir 2,29 metros. Una auténtica celebridad que viajó por todo el mundo mostrando su estatura, la más imponente de finales del siglo XIX. La localidad también alberga patrimonio arquitectónico digno de echarle un ojo, como un monumento al justiciazgo, un mentidero, un triple arco románico o la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, declarada monumento histórico-artístico de Aragón.
Tras días de dejarse la voz en el festival, no hay mejor manera de relajarse y descansar antes de volver a casa que admirando sin prisa la panorámica que ofrece el Mirador de San Mamés. El embalse de Lanuza, la sierra de Tendeñera, el propio pueblo de Sallent de Gállego y la Peña Foratata componen un encuadre que se queda fijo en la memoria de quien lo presencia.
Al norte del Pirineos Sur
Tan solo a 26 minutos en coche, situado a 1.630 metros de altitud, se eleva Baños de Panticosa. Un balneario conocido desde la época romana y custodiado por seis fuentes de agua rica en propiedades minero-medicinales. Es un plan ideal para recuperarse de la resaca emocional que dejan los conciertos de Kraftwerk, La Pegatina o Los Chikos del Maíz. Pero, si el baño no entra en los planes, conocer los Ibones de Aneyet y Lagunas Negras sí lo hará. También a menos de media hora se encuentra el inicio de una caminata que recorre los lagos y sus aguas gélidas y cristalinas ideal para hacer tiempo hasta los conciertos o para los que aún mantengan una reserva de energía después del festival.
Además, desde Sallent de Gállego se puede acceder a estaciones de esquí en cortos viajes de coche. Las imponentes pistas localizadas en las montañas nevadas en invierno, también dejan increíbles paisajes en verano. Recorre desde la altura del telesilla las estaciones de Aramon Formigal – Panticosa para ver el Pirineo aragonés desde una perspectiva inmersiva y alternativa.
Más al sur del Pirineos Sur
De vuelta a casa, es de parada obligada para los amantes de la fauna y la flora pirenaica el parque de Lacuniacha, a poco más de 15 kilómetros al sur del festival. 40 hectáreas de representación de la flora y fauna que habitó y habita en el Pirineo aragonés en un centro de recuperación de 15 especies entre las que se encuentra el Bisonte Europeo o el Lince boreal y donde los animales viven en libertad.
En la bajada por el Pirineo, la carretera A-136 te puede acercar a la primera capital que tuvo el Reino de Aragón: Jaca. Visita la riqueza patrimonial de una de las localidades más famosas de la provincia de Huesca que se refleja en la Ciudadela, la Catedral de San Pedro y el museo Diocesano, entre otras. Llegados al Somontano, un paseo por el pueblo de Alquézar, uno de los pueblos más bonitos de Aragón, como broche final a la experiencia del Pirineos Sur.
