Qué ver en Alquézar, uno de los mejores pueblos del mundo para viajar
La localidad medieval de la provincia de Huesca ha sido una de las 32 elegidas por la Organización Mundial del Turismo de entre los cinco continentes.
Si hay algo por lo que se caracteriza España es porque son muchos los lugares que se pueden descubrir sin salir del territorio nacional. Esto, a su vez, hace que no sea precisamente una tarea sencilla decantarse por un punto de la geografía. Pero la Organización Mundial del Turismo (OMT) lo pone fácil: ha seleccionado los 32 mejores pueblos de 18 países de las cinco regiones del mundo para hacer una escapada turística. Uno de ellos es Alquézar, una localidad medieval de la provincia de Huesca cuya belleza le hace destacar sobre el resto.
Este galardón distingue a los destinos rurales que hacen del turismo un motor de desarrollo que genera nuevas oportunidades de empleo y riqueza, al tiempo que conservan y promueven los valores y productos de la comunidad. De igual forma, se reconoce a los pueblos por su compromiso con la innovación y la sostenibilidad y por fomentar un desarrollo turístico en sintonía con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
Dónde está Alquézar y cómo llegar
No es el primer reconocimiento que recibe Alquézar: ya estaba declarado Conjunto Histórico-Artístico, al tratarse de un pueblo medieval. Pero quizá este título sí sea uno de los más especiales. De entre todos los pueblos, la Organización Mundial del Turismo ha puesto su foco sobre esta localidad española de la comarca Somontano de Barbastro, en la provincia de Huesca.
Alquézar está situado a tan solo 48 kilómetros de distancia de Huesca –unos 50 minutos en coche- en la margen derecha del río Vero, en su último cañón, al pie de las sierras de Balcez y Olsón. Parte de su término municipal está ocupado por el Parque natural de la Sierra y los Cañones de Guara. Cuenta con poco más de 330 habitantes, según el último dato, de 2021.
Con respecto a la capital de Aragón, este pueblo está separado de Zaragoza por unos 124 kilómetros, lo que supone un viaje de hora y media en coche. Por su parte, Teruel está algo más lejos: a 299 kilómetros, cerca de tres horas de viaje.
Qué ver en Alquézar: de la colegiata de Santa María la Mayor a la muralla a la torre albarrana
Como si de una máquina del tiempo se tratase, sus estrechas calles empedradas y sus emblemáticos rincones invitan a retroceder unos cuantos años. Uno de esos espacios que no deben perderse los turistas es su castillo de origen islámico, que fue convertido en colegiata tras la reconquista cristiana.
Construida en el siglo IX d.C. por Jalaf ibn Rasid, la colegiata de Santa María la Mayor fue primero una fortaleza, cuyo objetivo era frenar a los reinos cristianos del norte. En ella se pueden contemplan las huellas que han ido dejando las diferentes corrientes artísticas en el transcurrir de los siglos, tal y como explican en la página de Turismo de Aragón.
Pero la colegiata de Santa María la Mayor no es el único lugar de interés con el que cuenta Alquézar. Este pueblo conserva aún algunos tramos de la muralla, la torre albarrana, las ruinas de una torre cuadrangular y fragmentos de la iglesia románica -integrados en un claustro del siglo XIV- todo ello del siglo IX.
Tampoco puede faltar la visita al Museo Etnológico Casa Fabián, ubicado en una típica casa del Somontano del siglo XVII con el propósito de mostrar las costumbres y artes populares del pueblo y de la región. A esto hay que añadir la Plaza Mayor del pueblo, cuyo encanto no deja indiferente a nadie.
Qué hacer en Alquézar: senderismo, barranco...
Aquellos que sean menos fans del turismo en su más estricto significado, pueden optar igualmente por pasar unos días en Alquézar. Son muchas las actividades que es posible hacer, por ejemplo, de aventura, como el descenso de un barranco con rapel o el ascenso por una vía ferrata.
Además, se puede realizar una ruta de senderismo auto-guiado, descubrir el famoso valle del río Vero, un circuito de spa o visitar una de las bodegas D.O. Somontano y degustar una cata de vinos.
