¿Dieta blanda o astringente para la gastroenteritis? Las diferencias clave, según una nutricionista

La dietista y nutricionista Cynthia Morillas ha explicado a HERALDO las diferencias clave entre una dieta y otra, diseñadas para abordar diferentes problemas de salud digestiva. 

Dieta blanda y astringente.
Dieta blanda y astringente.
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La dieta blanda es un tipo de alimentación que se ha diseñado para casos de problemas digestivos, como una gastroenteritis, basada en alimentos que no irriten el estómago ni el intestino, y que aporten los nutrientes necesarios para la recuperación. Y, en España es muy habitual en algunas épocas del año el criptosporidiosis, un virus estomacal producido por el parásito cryptosporidium que suele provocar una diarrea más larga de lo habitual. Entre otros muchos virus y bacterias que afectan a nuestro estómago. 

No obstante, es importante saber diferenciar una dieta blanda de otra astringente. Para ello, algunas de las diferencias clave que hay que tener en cuenta, tal y como explica la nutricionista Cynthia Morillas (@nutricynn), son: "los propósitos de cada dieta, los alimentos permitidos y para qué se recomienda cada una". Basándonos en estas premisas, vamos a ver y diferenciar una dieta blanda de otra astringente. 

Dieta blanda para la gastroenteritis 

El propósito de la dieta blanda, según la nutricionista Morilla, es reducir la irritación del sistema digestivo y facilitar la digestión. En esta, los alimentos permitidos incluyen todos los suaves, bien cocidos y fáciles de digerir como "purés, sopas, arroz blanco, pollo hervido, compotas de frutas y pan blanco", destaca la nutricionista. 

Las dietas blandas se recomiendan en ciertos casos. Estos son, por ejemplo: después de cirugías, durante enfermedades gastrointestinales o cuando se necesita descansar el sistema digestivo. 

Dieta astringente para la diarrea

Por otro lado, las dietas astringentes buscan reducir la inflamación y frenar la diarrea, ya que contiene alimentos que tienen propiedades de "secado" o "astringentes".

En este caso, los alimentos permitidos son el arroz blanco, plátanos, manzanas, zanahorias, pollo hervido, té negro y galletas saladas, tal y como ha explicado Morillas. Y, se recomienda principalmente durante episodios de diarrea o después de problemas gastrointestinales. 

Así que, para conformar una dieta apropiada mientras sufrimos un problema gastrointestinal, es importante conocer estas diferencias y matices. Concretamente, Cinthya Morillas recomienda que "si alguien está enfermo y experimenta problemas digestivos, inicialmente podría comenzar con una dieta blanda para descansar el sistema digestivo. A medida que mejora, puede transicionar a una dieta astringente para controlar posibles síntomas de diarrea".

Lo fundamental es adaptar la dieta, según la gravedad y la naturaleza específica de la enfermedad. Y, como no, es aconsejable consultar con un profesional. 

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