Ático 55: una terraza mediterránea asomada a una Zaragoza de postal

El Hotel Avenida amplía su particular oasis en plena calle César Augusto con un espectacular 'roftop' que en 15 días estará abierta para desayunos, brunchs y eventos exclusivos.  

Terraza del Hotel Avenida de Zaragoza.
Terraza del Hotel Avenida de Zaragoza.
Oliver Duch

Entrar en el Hotel Avenida de la avenida de César Augusto de la capital aragonesa es lo más parecido a viajar sin salir de la ciudad que un zaragozano puede experimentar. Traspasar sus puertas es hacerlo hacia un oasis Mediterráneo, un espacio sin ínfulas, lleno de detalles que desembocan en un ambiente acogedor, moderno pero conectado con las tradiciones artesanas.

Hotel familiar de largo recorrido, la propiedad decidió acometer una reforma por etapas durante la pandemia, que a estas alturas va alcanzado cada vez más rincones del edificio.

La planta calle, dedicada a los desayunos de los alojados y ya muy asentada como lugar de actos y celebraciones, está ya totalmente reformada, con amplios salones decorados con piezas de arte, velas, todo en tonos crudos y piedra, y mucha presencia de elementos y tejidos naturales.

Ese ambiente se traslada ahora a lo más alto del hotel. A su ático con terraza asomada a algunos de los edificios más emblemáticos de Zaragoza.

"Creemos que hacía falta un ‘rooftop’ como este", cuenta Carmen Fernández Ariza, copropietaria del Hotel Avenida junto a Ignacio Nieto y decoradora del mismo.

Cuando Carmen dice ‘como este’ está hablando de un amplio espacio que antes ocupaban varias habitaciones. En esta nueva etapa, desaparecen para dejar paso a un espacio diáfano, dividido en dos partes, una interior acristalada y muy luminosa, y otra exterior, una gran terraza abalconada. "Hemos querido tener en cuenta el tiempo tan cambiante de Zaragoza".

La ambientación sigue la estela de la del resto del hotel: tonos sin estridencias, mucha presencia de de obras de arte, además de una cuidada presencia de vegetación, sobre todo plantas mediterráneas: olivos, cactus, jazmines...

Desde la terraza se pueden ver algunas de las mejores vistas de la ciudad, cúpulas, azoteas y edificios singulares: San Juan de los Panetes, El Pilar, los edificios de principios del XX del Coso, la embocadura de César Augusto y, sobre, todo, una bella y espectacular perspectiva del Mercado Central.

De momento, la terraza, llamada Ático 55, se reserva para los alojados y para eventos exclusivos de día o de noche. A partir del 15 de mayo estará también abierta a todo el mundo para desayunos y brunch, previa reserva. En el horizonte, los responsables del hotel están pensando en abrirlo para tomar copas y cócteles a la luz de la luna.

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