Kontrazinema Laboratorio o el cine que se desprograma en Zaragoza
El realizador y escaparatista Ángel Luis Martínez coordina semanalmente en el museo Pablo Serrano unas sesiones que pretenden redibujar la creación fílmica
El Laboratorio de Aragón Gobierno Abierto es algo más que nombre intrigante, aunque hay algo de coherencia en él y ese espíritu de experimentación y cabriola que preside la gran mayoría de sus iniciativas. Una de ellas se llama Kontrazinema Laboratorio, y su impulsor es el realizador audiovisual y escenógrafo Ángel Luis Martínez Saló, creador de segundo apellido pasoliniano que aboga en esta idea por la creación fílmica sin corsés. Las sesiones semanales que han desarrollado Martínez y sus compañeros de aventura en el mes de marzo continuarán hasta finales de junio, cada viernes por la tarde, en el museo Pablo Serrano de Zaragoza.
¿Qué se hace en Kontrazinema, y cómo surge? Martínez responde. "He trabajado en una multinacional de moda toda la vida, pero quería cambiar el chip y vi la ocasión de poner en marcha la idea que me rondaba la cabeza hace tiempo: un método para desprogramarnos del audiovisual convencional".
El impulsor de Kontrazinema (también lo fue en su día del inclasificable festival Obuxo de Javierrelatre) no plantea su actividad desde el prisma de la confrontación con lo establecido; más bien traza un camino alternativo. "El audiovisual está basado en la industria desde que entras en una escuela. Hay cuestiones que asumes como inevitables: meter muchas horas, trabajar un montón, cobrar poco… Mi intención es acercar más la creación audiovisual a la idea de arte, al humanismo, alejarlo del sistema; sé que suena paradójico, pero las siete claves de mi método se dirigen a escapar del otro método".
Cine en comandita
El laboratorio es un lugar de encuentro para hacer cine comunitario, horizontal, sin jerarquía. "Creamos juntos una pieza audiovisual, consensuada, para demostrar que otro cine es posible", dice Martínez. "Ni guiones ni director ni productores. Lo que queremos es coger cosas de varias corrientes que ya han intentado ‘hackear’ el cine antes, desde el Dogma a la ‘Nouvelle Vague’. No enseño nada en nuestros encuentros; hablamos todos, cada cual da su visión, incluyéndome a mí, e interactuamos. De momento, la cosa va bien, no han explotado los matraces. En el Pablo Serrano nos ofrecieron continuar otro trimestre, y estamos encantados".
-No hay estructura, hay camino.
-No hay academia, hay libertad.
-No hay jerarquía, hay eficiencia transversal.
-No hay ego, hay colectivo.
-No hay empresa, hay cooperativa.
-No hay distribución, hay redes.
La idea era dar forma a una pieza de videoarte. "Sí, en consonancia con el espacio en el que estamos, pero como seguiremos hasta el verano quizá la cosa derive a un documental. Hemos tenido los aportes del actor Jaime Ocaña y del artista plástico Rubén Blanco, y vendrá el realizador y fotógrafo Jorge Nebra con el músico y piloto de drones Dan Barrow".
Martínez aplica los criterios de libertad pura en su propia creación audiovisual. "Estuve en el taller de cine de Bigas Luna del que salieron Paula Ortiz, Pilar Palomero o Javi Calvo, entre otros… Obviamente -ríe- hay gente que lo aprovechó más que yo, pero algo que me enseñó Bigas es que el cine es más una función corporal, como una digestión después de una calçotada, una siesta o hacer el amor, no tanto un libro sobre el montaje o la luz".
En el laboratorio participan actualmente la escultora Esther de la Varga; las fotógrafas Cristina Sieso o Eva Oriol; Chema García, fotógrafo y colaborador habitual de Martínez en sus rodajes; el actor Jaime Ocaña, la actriz y productora Catalina Pueyo y una arquitecta italiana, Chiara Cossidente, que organiza un festival de cine en Potenza y trabaja en Zaragoza.
Cambio radical
El fundador de Kontrazinema cree que el cine que viene se va a parecer poco al que hemos tenido hasta ahora. "Las películas que más me han funcionado y por las que me han premiado las rodé en una tarde. Obviamente, he oído muchas veces que así cualquiera, que no son formas… y estoy de acuerdo, debería hacerlo cualquiera, sin miedo a lo que salga por no estar suficientemente preparado".
En Kontrazinema no necesitas de experiencia previa para aprender y aportar. "Nuestros hijos nos han dado una bofetada de realidad haciendo películas, vídeos y contenidos audiovisuales con móviles o equipos precarios, y un impacto en visitas con el que nosotros no podemos ni soñar. Está muy bien ir a la Escuela de Artes, a centros de formación audiovisual, o ver comedias románticas y de aventuras, o a Sorrentino, que me encanta… Cabe todo, y la curiosidad es bienvenida: en nuestro laboratorio puedes coger una cámara o actuar o ayudar con la iluminación, con el apoyo de todos. Quizá tu visión virgen da con la clave".
