gastronomía

Parraleta y moristel, dos banderas para los vinos de la bodega Sers

La bodega oscense apuesta por la recuperación de variedades, que muestra en sus vinos.

Pablo Canales y cuatro vinos de su bodega Sers.
Pablo Canales y cuatro vinos de su bodega Sers.
Montañés

Sers, en la localidad de Cofita, es una de las bodegas más pequeñas del Somontano. Entre sus promesas está la recuperación de variedades en peligro.

"A mí personalmente, como bodega y como defensor del territorio, las variedades parraleta y moristel creo que tienen que ser emblemas de la bodega", confiesa Pablo Canales, una de las manos de esta bodega familiar. Primero fue parraleta y, con la experiencia presente, han repetido la historia con moristel. "Estamos en proceso de aprender a trabajar con ella en la bodega, de ir evolucionando y adaptándonos a la uva", agrega Canales.

Estas fueron dos de las propuestas que se pudieron degustar el jueves en una íntima cata en Vino Premier, un curioso establecimiento dedicado al mundo del vino en la calle de Felipe Sanclemente de Zaragoza.

El vino de parraleta, llamado Sers Singular, guarda de cuatro a cinco meses en barrica y otros tantos en botella antes de ser descorchada. En nariz es atractivo, contiene poco tanino y el color rubí de la copa lleva a la boca matices a chocolate con leche o fruta madura. El proceso de recolección es largo y totalmente manual por la fragilidad de los granos, con una piel muy fina.

Por su parte, moristel se puede catar en Sers Dinantes, más complejo que el anterior que bendice los sentidos con una combinación de pimienta y vainilla.

El tercer tinto fue Sers Temple, una mezcla de merlot, sauvignon, cabernet y syrah –esta última de forma testimonial–. Un bonito relato familiar en torno a una ermita del pueblo le da nombre a este vino que muestra notas de salmuera, especias y frutas maduras.

Uno de los triunfadores de la velada fue el Sers Blanque, que viste la copa de un verdoso y sutil tono dorado, cuya última añada salió a la venta hace tan solo dos días. Mantecosa y cítrica, impresiona su evolución en la copa.

En total fueron un blanco y tres tintos que demuestran el potencial de Sers, porque, aunque pequeña, deja huella con sus vinos y relato, tal y como quedó claro entre los catadores. 

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión