Gastronomía

Turrón de chocolate y avellanas casero

El origen de este dulce, que se hacía tradicionalmente a base de miel o azúcares y almendras tostadas, data del siglo XI.

Los turrones llenarán las mesas de muchos hogares esta Navidad.

Llega la época navideña, y con ella las cenas de empresa, las cartas a los Reyes Magos, los regalos del amigo invisible, los dulces, las reuniones familiares, los juguetes, las películas de Papa Noel y el siempre ansiado anuncio de la Lotería.

Durante estos días, la ciudad de Zaragoza acoge diversas actividades para contagiarte del espíritu navideño, como visitar los mercados artesanos de la Plaza del Pilar, asistir a un cuentacuentos o volver a sentirte un niño con la magnífica Cabalgata de Reyes. Nosotros te proponemos un plan dulce y casero: hacer tu propio turrón de chocolate y avellanas.

La mayoría de los historiadores ubican el origen de este popular dulce en la península arábiga, allá por el siglo XI. Tradicionalmente se obtenía de la cocción de miel o azúcares, a los que se les incorporaban almendras tostadas. Hoy en día, las opciones son casi tan amplias como puedas imaginar: de trufa, de yema tostada, con chocolates de diversos sabores, rellenos de coco, con un toque de naranja…

La receta que veréis a continuación es sencilla y deliciosa. Con ella, tendrás el éxito asegurado en cualquier comida navideña:

Ingredientes

400g de chocolate para fundir con un 70% cacao. 100g de avellanas tostadas y peladas 60g de mantequilla sin salElaboración

Cortamos la mantequilla en dados y reservamos. Partimos por la mitad, aproximadamente, las avellanas y reservamos. Si preferimos las avellanas enteras, podemos saltarnos este paso. Troceamos el chocolate y lo derretimos al baño María, removiendo sin parar con la ayuda de una espátula. Cuando el chocolate comience a derretirse, añadimos la mantequilla y mezclamos hasta que quede todo uniforme. Cuando veamos que todo está perfectamente integrado, añadimos las avellanas y lo mezclamos todo con la espátula. Echamos toda la masa en un molde rectangular anti adherente. Lo dejamos templar a temperatura ambiente. Lo metemos en la nevera durante unas dos o tres horas.¡Ya está listo para servir!

- Consulta la agenda cultural de Navidad en Heraldo Ocio.