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Joaquín y Obeng, los nuevos hombres gol de la SD Huesca
La actual delantera azulgrana lleva marcados cuatro de los últimos cinco tantos.
La delantera de la SD Huesca al fin produce goles de forma regular aunque no precisamente con los nombres que estaban destinados a ello al principio de la temporada. Cuatro de las últimas cinco dianas han llevado la rúbrica de Joaquín y Obeng, la pareja por la que se está decantando actualmente Cuco Ziganda para el ataque. Ambos marcaron el domingo pasado en el 2-2 con el Ibiza, mientras que el ghanés se había estrenado en la victoria por 1-0 al Mirandés y el malagueño había visto puerta antes en el 1-1 con el Granada. En medio de estos partidos queda el desplazamiento a Gijón, otro 1-1, donde el que mandó el balón a la red fue Sielva en una falta directa.
Joaquín es un extremo que ahora está haciendo las veces de punta, algo que no es nuevo en su trayectoria como azulgrana, pero que tampoco había sido lo habitual, y que antes Ziganda lo había empleado por las dos bandas. Por su parte, el caso de Obeng es el de un delantero llegado en el mercado de invierno cedido por el Oviedo que en principio se antojaba que iba a actuar junto a un nueve de corte más clásico como Carrillo.
De hecho, así sucedió de inicio en su primera vez con los oscenses. Frente al Mirandés, el ghanés, un refuerzo demandado por el técnico al que ya logró sacar su mejor rendimiento durante su estancia en el Carlos Tartiere, formó con el ariete murciano. Sin embargo, el carrusel de cambios permitió que Joaquín pasase del extremo derecho a la delantera dando como resultado una dupla muy dinámica que coincidió con los mejores minutos del Huesca, en los que Obeng marcó de chilena el definitivo 1-0.
Lo que se vio gustó y en los entrenamientos posteriores Ziganda probó con ambos juntos. Se barajó la opción de que fuese la opción escogida para El Molinón, pero se acabó optando por un 5-2-3 en el que el delantero titular fue Kanté con Joaquín ocupando la banda derecha. En aquella ocasión coincidieron durante nueve minutos. Obeng recogió el testigo de Kanté en el 57 y el malagueño se lo entregó a Valentín en el 66.
La semilla, de todos modos, estaba plantada. Floreció con el Granada. La primera vez en la que ambos formaron juntos desde el pitido inicial. Marcó Joaquín a pase de Valentín y si durante los ochenta minutos que estuvo sobre el césped no lo hizo Obeng fue porque se encontró con un inspirado Raúl Fernández, el meta rival, especialmente en dos acciones al final de la primera parte. Sí lo logró con el Ibiza, en una contra en la que le asistió Joaquín, que también anotó después, a pesar de que en el acta se le adjudicó el tanto a Ratiu en una acción en la que el lateral rumano no llega a tocar el balón, como él mismo reconoce.
Resulta innegable que el ataque del Huesca se ha revitalizado en las últimas semanas. Lleva cuatro partidos seguidos marcando, algo que no sucedía desde el inicio del curso cuando se encadenaron seis entre la segunda y la séptima jornada. Antes en los cuatro primeros encuentros de la segunda vuelta, solo se habían podido festejar dos dianas, obra, curiosamente, de dos centrales, Blasco y Jorge Pulido.
Juntar a Joaquín y Obeng ha hecho que Valentín recupere la titularidad por la derecha tras tres jornadas en el banquillo. Además, ha movido a Juan Carlos a la izquierda. Un damnificado claro, en cambio, ha sido Carrillo sin minutos frente al Sporting, el Granada y el Ibiza.
