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La SD Huesca no retiene sus ventajas
Con el 2-2 de Ibiza, los azulgranas acumulan tres jornadas consecutivas en las que se han tenido que conformar con empatar a pesar de haber estado por delante en el marcador.
Por primera vez en todo el curso logró remontar un resultado adverso y también por primera vez desde la cuarta jornada -precisamente ante el mismo rival- marcó más de un gol en un mismo partido, pero ni por esas. El domingo frente al Ibiza, un colista con el agua al cuello, la SD Huesca se tuvo que volver a conformar con firmar tablas. Un 2-2 que la convierte con trece en la reina del empate en Segunda División y que, más allá de sus consabidos problemas para ganar a domicilio -son ya diez salidas seguidas sin hacerlo- ahonda en la dinámica que viene siguiendo desde el final de la primera vuelta y en lo que va de segunda. En las últimas nueve jornadas su cosecha ha sido de una victoria, un tropiezo y ocho tablas. Las tres últimas, a pesar de haberse adelantado.
Evidentemente, Cuco Ziganda ha construido un bloque difícil de derribar, pero al que cada vez le cuesta más ganar. Su parsimonioso ritmo de puntuación le permite ser ahora mismo el décimo con 37 puntos, ocho por encima del descenso y diez por debajo del ‘play off’. A los azulgranas les restan trece jornadas para acabar y otros tantos puntos que sumar para alcanzar los cincuenta, el objetivo fijado para la campaña y el listón en el que se suele fijar la salvación. Las cuentas salen, pero existe el deseo de llegar hasta ahí cuanto antes para evitar apuros y el anhelo, cada vez más vaporoso, de pensar en cotas más altas por aquello de vivir un desenlace liguero con alicientes.
En Ibiza, el equipo supo rehacerse del tanto inicial de Coke. Fue con dos fogonazos en los que primero Joaquín asistió a Obeng para empatar y después marcó -aunque en el acta se le adjudica el tanto a Ratiu- para irse al descanso por delante. Después ya en el minuto 68 Cristian Herrera cantó el definitivo 2-2.
En los dos tantos de los insulares hubo fallos individuales de los oscenses. En el primero Miguel no cubrió bien a Coke, que remató dos veces en un mismo córner, y en el segundo Tomeo se mostró blando con Ekain, que fabricó más de medio gol.
La historia para nada fue nueva. La semana anterior, en El Alcoraz con el Granada, también al final de la primera parte y también Joaquín, cuya conexión con Obeng en ataque ha sido una bocanada de aire fresco, dio ventaja a los locales aprovechando un pase de Valentín. Sin embargo, tres minutos después, en la prolongación del periodo, Quini estuvo más listo que Miguel y Neva restableció las tablas con el definitivo 1-1. Antes que con los nazaríes, en el desplazamiento previo a Gijón, en otro 1-1, Pedro Díaz había equilibrado para el Sporting de falta directa y con la colaboración necesaria de la barrera el tanto que del mismo modo había conseguido un cuarto de hora antes Sielva.
Lo que ahora se ha convertido en habitual, en la primera vuelta fue una rareza. Solo en dos ocasiones el Huesca desaprovechó una ventaja, en los 1-1 con el Lugo y el Burgos. En cambio, consiguió seis de sus siete victorias con un mismo resultado, el 1-0, el mismo con el que ganó al Mirandés en el único triunfo de 2023.
Vencer en Ibiza era importante en el plano moral y en el clasificatorio. En el primero, por lo que significaba volver a saborear la victoria -un gusto que se aleja otra vez en el tiempo- y romper con el maleficio de los desplazamientos, y en el segundo para dar margen de error a los encuentros en casa ahora que se atraviesa por una fase del calendario exigente en cuanto a la entidad de los rivales que llegan a El Alcoraz.
El próximo, el sábado a las 18.30, será el Levante, el segundo clasificado y que precisamente es, junto con el Burgos y el Sporting, el segundo equipo con más empates, doce. Los granotas, con los que se inauguró el curso con un premonitorio 0-0 en Valencia, están sacando más jugo a las tablas. Si para los oscenses suponen la base de sus resultados -al margen de sus trece empates llevan ocho victorias y ocho derrotas- en el caso de los también azulgranas sirven para sazonar sus catorce triunfos. Solo han caído en tres ocasiones.
