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La SD Huesca, a por un salto adelante en Gerona
Los azulgranas tratarán de dar continuidad ante el Girona a los buenos minutos protagonizados durante el derbi. Cuentan con las bajas de Pulido y Ferreiro, y con la duda de Seoane.
Es el segundo desplazamiento en menos de una semana y en él a grandes rasgos el objetivo será el mismo. Tras el 0-0 del derbi aragonés en La Romareda, la SD Huesca busca ante el Girona una victoria que le sirva de punto de inflexión dentro de un primer tramo de temporada en el que no se están cumpliendo las expectativas. En el empate con el Real Zaragoza, los azulgranas protagonizaron una buena primera parte seguida de un segundo periodo que no lo fue tanto. Durante muchos minutos las sensaciones fueron positivas, lo que contrastó felizmente con la derrota previa ante el Tenerife (1-2). Ahora hay que darles continuidad y refrendarlas con un buen marcador ante un contrincante de los llamados también a pelear por los puestos altos, pero cuya situación es apurada. Habrá que hacerlo, eso sí, sin dos piezas básicas, Pulido y Ferreiro.
Ambriz se desplazó ayer a tierras catalanas acompañado por veinte jugadores, entre los que no figuraban el central y el extremo. La ausencia del primero era previsible después de que acabase el lunes con molestias físicas y de que durante los días previos no haya trabajado con normalidad, mientras que la baja del gallego resultó inesperada. Ferreiro presenta una lesión en en el bíceps femoral de la pierna derecha que se produjo durante uno de los últimos entrenamientos.
Sí que están en cambio Ratiu, que regresa tras su concentración con Rumanía, y la otra duda que existía junto a la de Pulido, Seoane. El medio, sustituido en el descanso del derbi por una fisura en un dedo, entró en la citación después de que se hubiese probado por la mañana. Su concurso de todos modos no es seguro y dependerá de su evolución en las próximas horas. Al respecto hay que tener también en cuenta que el martes llega a El Alcoraz el Málaga y que el domingo siguiente los oscenses visitan al Burgos.
Ambriz acabó satisfecho con el desempeño de sus hombres ante el Zaragoza y apunta a que tocará su once lo menos posible. Así, el sustituto de Pulido en la defensa sería Cristian Salvador, mientras que si Seoane no juega de inicio para acompañar a Rico en la medular opositarían Mosquera y Nwakali.
El Girona de Míchel Sánchez, el técnico que condujo hace dos campañas a los oscenses al ascenso, se encuentra en descenso con ocho puntos sumados. Tres más tiene el Huesca, que en el inicio de la décima jornada ve el furgón de cola a dos puntos, el ‘play off’, a tres y el ascenso directo, a siete. Si los albirrojos solo han ganado en uno de sus últimos ocho compromisos, la trayectoria de los de Ambriz tampoco da para muchas alegrías. A los dos triunfos iniciales, solo se les ha añadido uno más en los siete careos posteriores, el 0-2 con la Real Sociedad B.
El técnico mexicano sigue dándole vueltas a la forma de hacer funcionar la maquinaria de un equipo que, aunque acostumbra a dominar la posesión, tiene problemas para generar juego por las zonas centrales y al que a sus delanteros les cuesta entrar en acción. Semanas atrás también se ha hablado de la falta de contundencia defensiva. En La Romareda, a pesar de las dos veces que Álvaro Giménez se estrelló con la madera -una de ellas en un penalti- la zaga transmitió mayor firmeza. Enfrente estaba el equipo que menos goles ha marcado hasta el momento y ahora se medirá a uno que solo ha conseguido uno más, seis.
Míchel podrá contar con dos ex del Huesca, Samu Saiz y Borja García. En cambio, son bajas seguras Juncà y Lozano, y dudas Terrats y su gran referencia ofensiva, Stuani.
