La SD Huesca, dispuesta a hacer un esfuerzo por Vavro

Es joven, ha mostrado un buen nivel en el desenlace de la temporada recién acabada y va a estar presente en la Eurocopa con su selección, Eslovaquia. Retener a Denis Vavro en la SD Huesca no va a ser una tarea nada sencilla, en El Alcoraz se es consciente de ello, pero aún así no se quiere dar por perdido del todo al central. Sus recientes declaraciones al periódico italiano ‘Corriere dello Sport’ asegurando que estaba "apegado" al club azulgrana y que quizá vuelva "para ayudar a recuperar la Liga", han sido valoradas de forma más que positiva y han animado a tratar de apurar las opciones de poder seguir contando con él.

Vavro, de 25 años, llegó cedido desde la Lazio al final del pasado mercado de invierno y todavía tiene contrato con los romanos hasta 2024. Sin embargo, su experiencia en Italia, donde aterrizó hace dos años tras haber brillado en Dinamarca en las filas del Copenhague, no ha sido la mejor, lo que hace que su preferencia en estos momentos sea jugar en España, a pesar de que Simone Inzaghi, entrenador que en la primera parte del último curso solo lo alineó 31 minutos, se haya marchado al Inter de Milán.

Sus palabras concuerdan con lo que le manifestó a los responsables del Huesca tras consumarse el descenso, que haría todo lo posible por devolver al equipo a la máxima categoría. Ahora para traerlo de vuelta, aún a sabiendas de que sería un importante refuerzo para Segunda División, habrá que tener en cuenta variables que van desde la propia disposición de la Lazio, hasta los emolumentos del jugador, en Italia los sitúan entorno al millón de euros por curso. Además de las posibles ofertas que el central pueda recibir desde otros clubes.

Una vez superados una serie de problemas físicos derivados también de la inactividad por la que atravesó en los primeros meses de la campaña, el eslovaco acabo por convertirse en una pieza importante para Pacheta, que lo empleó en once partidos y que lo alineó como titular en los siete últimos lo que le valió la llamada de su selección, un premio que no esperaba.

Regrese o no, lo cierto es que el Huesca va a tener que incorporar a lo largo del verano alrededor de seis defensas. En estos momentos tiene en nómina a los centrales Pulido, Insua y Siovas, y al lateral izquierdo Galán. De ellos, el segundo se recupera de una rotura de ligamentos que no le permitirá volver hasta ya arrancada la temporada, al griego se le va a tratar de retener, aunque podría recibir proposiciones de Primera, y Galán se da por hecho que saldrá con el Leeds como destino más pujante en estos momentos. Así, serían necesarios cuatro jugadores de banda y al menos dos zagueros.