Partido Huesca-Zaragoza: todo preparado en El Alcoraz

Primero ha hecho acto de presencia el autobús del Real Zaragoza. Sobre las 14.20 la expedición blanquilla, que por primera vez en un derbi aragonés ha pernoctado en la capital oscense, ha asomado en El Alcoraz desde el sur. Allí le esperaban los 190 aficionados que animarán al equipo dentro del estadio a partir de las 16.00 y que han entonado diversos cánticos como el “¡Volveremos a Primera!” y el himno ondeando bufandas y banderas. Varios de los jugadores se han girado desde la escalinata de acceso para saludar.

Ocho minutos después ha sido el turno de la SD Huesca, que ha arribado desde el norte recibido por el himno y por bengalas de humo azul y grana. También en su caso han sido cerca de 200 los hinchas presentes, una cifra que posteriormente ha ido en aumento. Los jugadores de Míchel Sánchez, como el caso de Mosquera, denotaban concentración en su rostro.

Tanto antes como después de la llegada de los dos equipos el buen ambiente ha sido la tónica dominante en El Alcoraz, donde se ha organizado una fiesta con música, bebida y cómida, y en el que se entremezclan hinchas de ambos conjuntos, aunque los llegados de Zaragoza se encuentran más concentrados cerca de Gol Sur, donde serán acomodados. Las banderas de Aragón abundan y también se aprecian grupos de amigos con simbología blanquilla y azulgrana.

La nota curiosa la ha puesto una pareja de japoneses que, con un cartel en la mano, buscan entradas para acceder al estadio. Sin duda, la presencia de Okazaki, en el Huesca, y de Kagawa, en el Zaragoza, ha resultado de reclamo para ellos.

Desde por la mañana, el ambiente a derbi se respira por toda la capital oscense junto al propio de la lotería de Navidad. Las peñas se han reunido en sus diferentes locales para almorzar y marchar desde ahí al estadio y Fenómenos Oscenses ha celebrado una comida de confraternización con la Federación de Peñas del Real Zaragoza.