Al Casademont Zaragoza solo le sirve su mejor versión ante el Barça en el Palau
El Barça examina a un equipo todavía en construcción, que encadena dos derrotas seguidas tras un brillante inicio.
La visita del Casademont Zaragoza este martes al Palau (20.30) lo requiere todo: la inspiración anotadora de los dos primeros partidos y el crecimiento táctico posterior. Solo así se puede sorprender a un Barça intratable, que a pesar de los problemas económicos que afectan al club de forma global, sigue contando con una plantilla altamente competitiva.
No hay espacio para las concesiones. Para competir esta noche, el Casademont debe firmar un partido casi perfecto. En ataque, debe parecerse al que fue contra el Manresa y el Bilbao, marchándose hasta los 100 puntos gracias a una efectividad abrumadora. En defensa, salvando el último cuarto, puede servir el ejemplo del duelo ante el Valencia, cuando los de Ponsarnau lograron dominar el rebote y contrarrestar el físico de uno de los bloques más poderosos de la liga.
Aunar estos aspectos, la puntería y la solidez táctica, la iluminación en el lanzamiento y la inteligencia para controlar el ritmo de juego, es el único camino hacia la sorpresa en Barcelona; hacia la primera victoria en la Ciudad Condal desde el año 2010.
El Barça de Jasikevicius mantiene el bloque de la pasada temporada. Salieron Hanga y Heurtel con destino al Real Madrid. Tampoco siguen Pustovyi (Gran Canaria), Claver (Valencia ), Westermann (Mónaco) o Bolmaro (Minnesota Timberwolves); pero a cambio llegaron jugadores de reconocido nivel -Sanli, Jokubaitis, Laprovittola o Nigel Hayes, que está siendo una de las grandes sensaciones- y se aseguró la continuidad de los pesos pesados.
A pesar de la situación económica del club, Mirotic sigue siendo el estandarte del proyecto. No aceptó la rebaja de sueldo (cobra cuatro millones netos) que le pidió Laporta en verano, pero tampoco terminó saliendo y, ya centrado en lo que mejor sabe hacer, vuelve a liderar al equipo con un promedio de 17 puntos y ocho rebotes por partido.
A la calidad del serbio, hay que añadir la aportación de Higgins, Calathes, Davies, Kuric u Oriola, así como la de canteranos como Sergi Martínez y Michael Caicedo. Un plantel de lujo que, respecto al último tramo de temporada pasada, ha perdido a Pau Gasol. El futuro de la leyenda del ‘16’ viene siendo una incógnita que hoy quedará resuelta. A las 17.00, hay programada una rueda de prensa en el Liceo en la que, previsiblemente, comunicará que lo deja.
Esta circunstancia tiñe de emotividad el encuentro. El Casademont será testigo del homenaje que pueda brindarle el Barça. Después, los reconocimientos quedarán a un lado. Los zaragozanos saltarán al parqué con el objetivo de romper, en el escenario más complicado posible, la racha de dos derrotas consecutivas ante el Burgos y Valencia Basket.
En ambos choques desapareció el acierto ofensivo de los dos anteriores compromisos. De los 99 puntos de media en la anotación, con una efectividad del 60% en los tiros de dos y del 45% en los triples, se pasó a los 62 puntos de media, con unos deficientes porcentajes del 43% en lanzamientos de dos y del 21% en tiros de tres.
Las sensaciones fueron peores contra el Burgos. Ante el Valencia, a pesar de la derrota, se compitió. Los de Peñarroya presentaban bajas, sí, pero no dejan de ser uno de los equipos con más recursos de la liga y el Casademont fue capaz de frenar su poderío durante tres cuartos, antes de que las faltas y las malas decisiones de la recta final condenaran a los aragoneses.
Para esta noche, el cuadro de Ponsarnau espera recuperar la mejor versión de McLean y Waczynski, que ante el Valencia tuvieron mucho menos protagonismo del que acostumbran.