Los hosteleros de Zaragoza prevén el cierre de hasta un 15% de las terrazas en calzada tras la subida de tasas
Afectará, sobre todo, a las más pequeñas y menos rentables. Actualmente hay alrededor de 650. El sector admite preocupación por el incremento del recibo del agua y las basuras a partir de enero.
Los hosteleros prevén el cierre de entre el 10% y el 15% de las terrazas en calzada, las popularmente conocidas como terrazas covid, tras la subida de tasas que se aplicará a partir de 2024. Según datos de la Asociación de Empresarios de Cafés y Bares, en la ciudad hay actualmente unas 650, cifra que irá a la baja una vez que se aplique el nuevo coeficiente, que pasará del 2,2 al 3. Esto quiere decir que los que sigan apostando por ellas pagarán un 300% más que quienes tienen una terraza al uso.
El propio Ayuntamiento justificó la subida como una forma de "avanzar hacia la normalización" tras tres años marcados por las consecuencias de la pandemia y la subida del Índice de Precios de Consumo (IPC) y de estimular la implantación de terrazas "con una menor afección a la movilidad peatonal y al estacionamiento de vehículos".
Estos veladores nacieron en 2020, durante los meses más duros de la crisis sanitaria, con el objetivo de garantizar la subsistencia de aquellos negocios que carecían de terraza. Lo hicieron ganando terreno a las calzadas; a costa de las plazas de aparcamiento y la zona azul. Ya en 2021, poco tiempo después de su puesta en marcha, se contabilizaban más de 200, con una reducción de alrededor de medio millar de plazas de parquin que fue a más.
En 2020 y 2021, los hosteleros no tuvieron que pagar la tasa de veladores, una medida con la que el Consistorio quiso mostrar su apoyo al sector, uno de los más afectados, en términos económicos, por la covid-19. De cara al próximo año, sin embargo, se van a encontrar una realidad bien distinta. El gerente de la asociación de Cafés y Bares, Luis Femia, cree que el incremento del coeficiente que se aplica a las terrazas en calzada desincentivará, especialmente, la apuesta por las de menor tamaño; aquellas que resultan menos rentables.
"La subida es significativa. Se va a notar, y es ahí donde entrará la valoración de cada uno. Los propietarios tendrán que analizar si siguen manteniéndolas o ya no les compensan", reconoció ayer, sin ocultar la "preocupación" del sector por el escenario que se dibuja de cara a 2024 como consecuencia de la subida del recibo del agua –que se encarecerá hasta un 8,5%– y de la basura, que aumentará otro 29%."Eso sí afecta a todos. Con el consumo de agua que hacen estos establecimientos y el nivel de residuos que generan, el incremento puede ser importante", indicó.
La asociación era consciente de que el Ayuntamiento iría incrementando la tasa hasta volver, poco a poco, a un escenario más parecido al de 2019. Y más teniendo en cuenta que el coeficiente del 2,2 que se aplicaba hasta este año no había sido suficiente para revertir las cifras.
Partidos como Podemos llegaron incluso a plantear su supresión, un extremo que no entra en los planes del Consistorio. En el último año, defienden los empresarios del sector, ya se han ido desinstalando algunas de estas estructuras. "La reordenación se estaba produciendo por sí sola. O bien durante el proceso de autorización o porque el propio hostelero decidía renunciar a ellas si prefería centrar su actividad en el interior", señalaron.
Creen, sin embargo, que esta nueva modalidad de terrazas –que no pueden restar más de un tercio de las plazas de aparcamiento de la manzana– se mantendrá a futuro, dado que "el propio cliente lo demanda". "En el medio y largo plazo, la finalidad de estas estructuras es que aquellos bares que por las características o la anchura de la calle en la que están no pueden montar una terraza tengan esa opción", comentaron.
En estos momentos, el sector está en pleno proceso de renovación, ampliación o reducción de veladores y sombrillas. Solo a través del convenio de Cafés y Bares se han tramitado más de un millar de solicitudes, aunque el plazo seguirá abierto hasta el próximo 31 de diciembre para aquellos que quieran presentarlas de manera individual.
"Buenas perspectivas"
La subida prevista a partir del 1 de enero no afectará a las terrazas ubicadas en las aceras, y garantizará un cierto "reequilibrio" por los ingresos perdidos en estos años en la zona azul.
Hay empresarios, reconocieron desde Cafés y Bares, que todavía confían en que pueda haber alguna "variación" de última hora, pero la aprobación de las ordenanzas en la pasada comisión de Hacienda –que salieron adelante con el único voto a favor del PP, la abstención de Vox y el rechazo de la izquierda– no parece apuntar en esa dirección.
Aun con todo, los hosteleros esperan un buen final de año. El buen tiempo y apuestas como la XXVIII edición del Concurso de Tapas de Zaragoza y Provincia están animando los establecimientos y llenando las terrazas, dejando imágenes poco habituales para estas fechas. "Las expectativas son buenas, pero siempre con incertidumbre y trabajando mucho con el corto plazo. Al final, los acontecimientos se suceden como se suceden y todo termina afectando al consumo. Por el momento se está manteniendo, pero el ticket medio no termina de llegar a los niveles de 2019", dijo Femia.
