¿Hará falta chaqueta? La previsión del tiempo para el Vive Latino 2023 de Zaragoza
Miles de asistentes están pendientes de la meteorología para escoger la vestimenta adecuada para dos días de festival.
Es la gran incógnita de todos los festivales musicales al aire libre. ¿Acompañará el tiempo? ¿Serán las circunstancias meteorológicas las apropiadas? Obviamente, que no llueva es la principal petición de los organizadores en este II Vive Latino de Zaragoza, para que todo pueda desarrollarse con la mayor normalidad. La mirada al cielo y las consultas a las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) han sido constantes en los últimos días. Aunque la entidad siempre recalca que las previsiones pueden cambiar, y que resulta muy complicado hacerlas con gran antelación, en estos momentos ya son muy claras y lo lógico es que resulten afinadas en cuanto a los temas principales.
Temperatura en Zaragoza
Las temperaturas en esta segunda semana del mes de septiembre han vuelto a ser características del verano en Zaragoza. Y las que ofrece Aemet para este viernes 8 y sábado 9 son casi idénticas. Entre 18 y 19 grados de mínima, 33 de máxima (justo a primera hora de la tarde, cuando empiezan los conciertos) y ninguna posibilidad de precipitaciones: 0%, aunque a principios de semana se curaban en salud con un 15%.
Viento del sureste durante el Vive Latino 2023
Otro dato importante, y más aún a orillas del Ebro, es que se espera brisa. Hasta 15 y 20 nudos de viento del sureste, justo en la dirección opuesta a la del característico cierzo zaragozano. Ese viento aliviará ligeramente el calor en las horas de temperaturas más altas, y quienes sean más previsores entre los que piensen darlo todo se llevarán la socorrida chaqueta para la salida.
Hay otro detalle a considerar: en los grandes conciertos, el calor humano hace que las temperaturas no obedezcan exactamente a lo que dicen los termómetros. El entusiasmo sirve para calentar los corazones de las personas, así que habrá que refrescarse adecuadamente en las horas más calurosas, y solo quienes aguanten hasta el final de las jornadas deberán preocuparse por las prendas de abrigo.
