El granizo daña frutales, viñas y coches en Morata de Jiloca, Miedes, Paniza, Herrera, Bajo Jalón y el norte de Teruel
En el Campo de Cariñena se ha recogido granizo con un diámetro más grande que una moneda de dos euros y en la zona de Calatayud ha habido grandes acumulaciones.
El aviso naranja por lluvias y tormentas en la provincia de Zaragoza ha cumplido con parte de sus advertencias y ha dejado fuertes descargas de agua y granizo en varios puntos de la delimitación. Entre ellos se sitúan localidades como Morata de Jiloca, Miedes y Ruesca, en la Comunidad de Calatayud, y Paniza, en el Campo de Cariñena.
En esta demarcación, pluviómetros como el situado en el embalse de las Torcas, dentro del término municipal de Tosos, han registrado más de 27 litros en unos 30 minutos. Para de esa precipitación en la zona ha caído en forma de granizo, como es en el caso de Paniza, donde los 'proyectiles' han superado el tamaño de monedas de dos euros.
"Depende de la parte del término ha hecho más daño o menos. En la zona baja, desde Encinacorba, ha cogido mucho viñedo y le habrá causado daños del 100% fácilmente. En otras partes, solo alguna hoja suelta. Aunque en la autovía hay coches con los cristales rotos", explicaba el alcalde de Paniza, José Manuel Cebrián.
Uno de los primeros municipios que ha recibido la descarga de la tormenta, generada en la zona de Calatayud, ha sido Morata de Jiloca, donde la acumulación de pedrisco ha colmatado las mallas protectoras de algunas fincas de manzanos. "La incidencia, como pasa en estas tormentas ha sido desigual", indicaba el regidor, Miguel Langa.
En su caso, el pluviómetro ha recibido "cerca de 15 litros en unos 20 minutos". "Ha caído muchísima agua y ha dejado fuertes picadas", apuntaba el primer edil, que se encontraba en las propias fincas retirando parte del hielo para que no dañe las estructuras. Todavía era pronto, explicaba, para hacer valoraciones de daños.
Más evidentes eran en Miedes, donde la envergadura de las piedras ha dejado marcas hasta en las ramas de los cerezos. "Nos quedaba por coger algo de cereza tardía. Ha caído con agua, pero mucho en seco y una finca es que la ha devorado entera", describía el alcalde, José Lorente.
En su caso, todavía sobre el terreno, advertía de que "en la viña será tres cuartos de lo mismo". "Estas tormentas hacen que en 50 metros cambie todo, pero el daño ha sido mucho. Es un año completo", sentencia. Se refiere a que, en el cereal de secano, lo que tendría que estar ya de color dorado se ha reverdecido.
"Se ha puesto verde y en espiga. Ahora habrá que esperar a que se seque y ver qué podemos coger, si merece la pena", alerta Lorente.
En otras localidades, como Lumpiaque, en la comarca de Valdejalón, la tormenta ha dejado cerca de 20 litros de agua además de algo de piedra en unos 10 minutos.
Destrozados en Herrera de los Navarros
En las fotografías, se pueden ver los huecos abiertos por el pedrisco en los canalones y tragaluces, así como cristales saltados y destrozados en los vehículos. "En el campo ya casi es lo de menos, después de cómo ha venido el año. Cereal quedaba poco de segar y alguna almendra habrá tirado, pero se puede recuperar", valoraba.
Según el pluviómetro de la cooperativa herrerina, lo recogido han sido cerca de ocho litros. "Ha cogido prácticamente todo el término del pueblo", explicaba Felices. Durante el mes de junio, han sido varias las granizadas que han caído en esta localidad del Campo de Daroca, la última afectando también a localidades como Mainar, Luesma y Cerveruela, cuando la torrencialidad llegó a cortar carreteras.
Daños del 70 y 80% en Lumpiaque y Rueda de Jalón
La tarde de tormentas ha dejado consecuencias en el bajo Jalón, con fuertes granizadas en zonas como Lumpiaque y Rueda de Jalón, donde fincas de pera, manzana y maíz se han visto seriamente afectadas. "Tenía pera ercolini para empezar a cogerla la semana que viene. Mañana me venían los palos (cajas). Esto es una putada", asume Marcelino Lorente, natural de Lumpiaque con fincas en la vecina Rueda.
"Hay fincas con el 70% de daño, y algo se podrá salvar del abrigo del árbol. Pero hay mucha fruta en el suelo. Un amigo tiene manzana y del 80% no bajará", detalla Lorente. En su caso reconoce que ha pasado de "no tener una mala perspectiva" a tener que embarcarse en nuevos gastos. "Mañana o pasado hay que meterme ya a tratar los árboles para sanear, y eso son más gastos en fungicidas. También habrá que llamar al seguro", prevé.
También en la capital aragonesa ha caído una fuerte tormenta con algo de granizo, lo que ha provocado la interrupción del tranvía y el desvío de autobuses.
