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Un abogado de Zaragoza que fue víctima de acoso sufre ahora graves daños en su moto 

La Policía Nacional ha detenido esta madrugada a un hombre por tirar su vespa y darle patadas al grito de "¡Jódete. hijo de puta!"

La Policía Nacional ha detenido esta madrugada en Zaragoza a un joven por emprenderla con una motocicleta, tirarla al suelo y causarle daños valorados en más de mil euros. Los hechos se han producido sobre las 6.00 a la altura del número 53 de la calle de Asalto. Y han sido los gritos e insultos de esta persona los que han sacado de la cama al propietario del vehículo, que al ver desde la ventana lo que estaba sucediendo ha llamado enseguida al 091 y se ha puesto a grabar con su teléfono móvil la escena.

Varias patrullas del 091 que se encontraban en la zona se han presentado de inmediato en el lugar del suceso, donde todavía permanecía el joven que había tirado la moto, una Vespa GTS 300. Los agentes le han pedido que se identificara, pero este no portaba ningún tipo de documentación, por lo que ha sido detenido y conducido a comisaría como presunto autor de un delito de daños.

Como se aprecia en las imágenes que ha grabado el damnificado y que han sido entregadas como prueba a la Policía, el arrestado se encontraba bastante afectado por el alcohol. De hecho, se apoya en una farola para no perder el equilibrio mientras propina las últimas patadas a la moto, apenas sin fuerza. Y se tambalea después cuando decide marcharse.

Lo que investiga ahora la Policía es si esta persona podría conocer al dueño del vehículo, ya que cuando lo empujaba para que cayera al suelo no dejaba de gritar: “Jódete, hijo de puta”. Se da la circunstancia de que el denunciante es un conocido abogado de Zaragoza que ya fue víctima de acoso por parte de otro individuo.

La titular del juzgado de lo Penal número 3 de Zaragoza condenó en abril de 2022 a S. D. Z. por hostigar a este letrado, al que no dejaba de llamar y enviar mensajes amenazantes, del tipo: “ingresas en prisión a tu madre”, “disfruta lo que te queda de abogado” o “vamos a por ti, que lo sepas, pediremos tu ingreso en prisión”. La jueza lo condenó a dos años y tres meses de prisión.

El vídeo grabado ahora por el abogado prueba que el causante de los daños a su moto es otra persona distinta. Pero la Policía intenta saber si se trata de un mero acto vandálico, fruto de una resaca etílica, o si los daños han sido premeditados.