fiestas del pilar

Zaragoza pedirá permiso a Sanidad para la Ofrenda, el ferial y 30 escenarios festivos durante el Pilar

Un grupo de trabajo entre DGA y Ayuntamiento se reunirá la próxima semana para analizar cada acto y, en su caso, fijar su aforo y las condiciones de celebración.

Terraza en la plaza del Pilar de Zaragoza.
Terraza en la plaza del Pilar de Zaragoza.
Guillermo Mestre

La prohibición de celebrar festejos populares en la Comunidad hasta el 31 de octubre ha variado muy poco los planes del Ayuntamiento de Zaragoza de cara al Pilar 2021. Según explicó la vicealcaldesa, Sara Fernández, el único acto que se cae de la programación prevista será el pregón, precisamente por representar el comienzo de las fiestas. El resto se mantiene encima de la mesa, incluida la Ofrenda de Flores, el recinto ferial y hasta una treintena de escenarios repartidos por la capital. Ahora será el departamento de Sanidad el que analice cada una de las propuestas en un grupo de trabajo que se reunirá la próxima semana y que dirá si se cumplen las condiciones de seguridad necesarias para su celebración.

Pese a que la propia vicealcaldesa aseguró hace unos días que si se decretaba la prohibición de las fiestas no iba a «enmascarlas» como si fueran una semana cultural, este jueves apostó por mantener toda la programación prevista –ya se habían descartado los actos multitudinarios, los pasacalles y cabezudos– salvo el pregón. A su juicio, la treintena de escenarios propuestos están «adaptados» a la normativa sanitaria por lo que, según el Ayuntamiento, la principal cuestión que se deberá debatir con Sanidad será el aforo.

En este sentido, la DGA recuerda que la actual normativa señala que «los eventos culturales, deportivos, taurinos o similares deberán contar con butacas o localidades preasignadas, debiendo mantenerse una distancia de seguridad de 1,5 metros entre personas o dejar un asiento libre en la misma fila, sin que se pueda superar una asistencia superior a quinientas personas en interior o mil personas en exterior».

Sin embargo, la regulación prevé excepciones, a las que se agarra el Consistorio zaragozano. «Cuando las reglas sobre aforo establecidas por la normativa vigente permitan la asistencia de más personas –añaden desde el Pignatelli–, se deberá solicitar autorización al Gobierno de Aragón».

Las decisiones que adopte Sanidad las próximas semanas respecto a la programación del Pilar serán, en todo caso, provisionales. Estarán condicionadas a la evolución de la pandemia –la DGA teme un posible repunte de contagios este mes por la vuelta del verano– y a los datos de los días previos a la celebración de los actos.

2 millones de presupuesto

Pero si finalmente la evolución es favorable y Sanidad da su visto bueno, el Ayuntamiento de Zaragoza ha diseñado una programación festiva adaptada a la covid con un presupuesto de 2 millones de euros. Entre los grandes puntos de interés estará el recinto ferial de Valdespartera, que contempla un aforo de hasta 10.000 personas y la instalación de 110 atracciones, 35 menos de lo habitual para esponjar el recinto y evitar aglomeraciones. No habría Espacio Zity ni carpa de la cerveza, pero sí circo y noria.

En el otro extremo de la ciudad, en el parque del Agua, el gobierno PP-Cs plantea un recinto «grande y versátil», según la vicealcaldesa, para los conciertos patrocinados que habitualmente se celebraban en la plaza del Pilar. Su capacidad podría alcanzar hasta los 20.000 asistentes aunque, dadas las actuales restricciones, su aforo final podría ser mucho menor. Será Sanidad quien determine si cumple con la normativa y cuántas personas podrán acceder llegado el caso.

Por su parte, el Ayuntamiento tiene la intención de mantener la Ofrenda de Flores. Sara Fernández no considera que sea un acto intrínseco a las Fiestas del Pilar, por lo que apuesta por organizar una versión reducida, tanto en recorrido como en participantes. De nuevo será la DGA la que tenga la última palabra.

También se debatirá sobre los escenarios en las plazas del Casco, elegidas por el área de Cultura para programar, con asientos y control de aforos, espectáculos de magia, humor y teatro. Además de estas propuestas, la programación infantil incluye las marionetas del parque Grande así como una versión adaptada de Río y Juego, en el recinto de Ranillas.

De igual modo, la programación juvenil se concentraría en la sala Multiusos y el Túnel del Oliver, mientras que la Feria de Artesanía volvería a plaza de los Sitios. En cambio, el Ayuntamiento todavía no tiene claro qué hacer con otros elementos muy vinculados a las fiestas, como son el cartel anunciador o los fuegos artificiales.

Junta de portavoces

Tras la reunión del Consejo Local de Aragón, el Ayuntamiento celebró una junta de portavoces extraordinaria para que la vicealcaldesa explicara al resto de grupos municipales la situación respecto al Pilar. Para la socialista Lola Ranera, la suspensión de los festejos es «una decisión muy acertada», pero acusó al gobierno PP-Cs de hacer «trampas» y «enmascarar» las fiestas al mantener la programación prevista. Por ejemplo, criticó que la vicealcaldesa no cancele actos como la entrega de medallas y reconocimientos de la ciudad, aunque defendió la Ofrenda.

Por su parte, el portavoz de ZEC, Pedro Santisteve, insistió en que «la mejor alternativa a las fiestas es reforzar los actos culturales por los barrios durante todo el mes de octubre». Mientras, desde Podemos, Fernando Rivarés criticó la «irresponsabilidad» del gobierno PP-Cs por mantener la programación del Pilar. «Es peligroso», afirmó el edil, que propuso organizar unos festejos alternativos en primavera para ayudar a los sectores afectados. Finalmente, Julio Calvo (Vox) hizo «corresponsables» al Ayuntamiento y a la DGA de lo que ocurra durante el Pilar de este año.

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