sucesos

La alcaldesa de Castellote afirma tras la reyerta mortal que "los vecinos han recordado el crimen de Igor el Ruso"

Raquel Benedí señala que la población ha rememorado el triple asesinato de Andorra en 2017.

La alcaldesa, Raquel Benedí, a la izquierda, conversa con una vecina en la plaza de Castellote.
La alcaldesa, Raquel Benedí, a la izquierda, conversa con una vecina en la plaza de Castellote.
Antonio Garcia/Bykofoto

"La gente del pueblo se ha acordado del episodio vivido con Igor el Ruso en Albalate del Arzobispo y Andorra –que terminó con dos guardias civiles y un ganadero asesinados–", ha explicado este sábado la alcaldesa de Castellote, Raquel Benedí, tras pulsar la sensación vecinal después de la pelea con armas blancas que ha terminado con un fallecido y dos heridos graves. Como las trágicas jornadas vividas en 2017, el suceso registrado en la noche del viernes al sábado pasado ha ocurrido en el medio rural turolense, ha estado protagonizado por personas llegadas de fuera de la provincia y evidencia algunas de las consecuencias negativas de la despoblación.

Sin embargo, a diferencia de lo ocurrido tras el tiroteo registrado en Albalate nueve días antes del triple crimen de Andorra, en los sucesos ocurridos en Castellote la búsqueda de posibles implicados en los apuñalamientos que hubieran huido comportó el inmediato despliegue de decenas de guardias civiles para peinar la zona, equipados con un helicóptero, además de la intervención de una unidad especializada en actividades acuáticas.

En los poco más de 20 kilómetros de trayecto entre Molinos y la vecina Castellote pasando por la pedanía de Dos Torres de Mercader, los automovilistas se tropezaban este sábado con tres controles de la Guardia Civil, además de coches patrulla circulando. En los controles, los agentes pedían la documentación de los conductores e inspeccionaban los maleteros, mientras el helicóptero de la Benemérita sobrevolaba el lugar.

Amplio despliegue policial

La propia alcaldesa reconoce que la misma noche del suceso se tropezó cuando volvía al pueblo "con un despliegue de la Guardia Civil como nunca había visto antes". Señala que las molestias que pueden comportar los repetidos controles de carretera se ven sobradamente compensados con la sensación de que las fuerzas de seguridad "están aquí".

Por la memoria de los vecinos ha pasado, no obstante, lo ocurrido en 2017 en Albalate y Andorra, y así se lo han transmitido varios residentes a la alcaldesa. Benedí se muestra convencida de que, tras los hechos de hace cinco años, "se haya aprendido la lección y una situación como aquella no se repita". Recuerda que ella misma pasó por la carretera entre Albalate y Andorra, tras el tiroteo registrado en la primera localidad y antes del triple crimen, y "no había ninguna presencia policial".

La inquietud se ha extendido a la vecina Mas de las Matas, en cuyo centro de salud falleció uno de los heridos en la reyerta y donde recibió atención médica otro de los lesionados. Un vecino ha afirmado indignado que "sean albaneses o sea Igor el Ruso, el caso que nos hacen la puñeta a la gente que vivimos en los pueblos".

La alcaldesa de Mas de las Matas, María Ariño, afirma que sucesos como este refuerzan "la sensación de inseguridad y desprotección" en la zona.

La trágica pelea ha estado protagonizada, según las primeras investigaciones policiales, por personas procedentes del Este de Europa. Tanto para los vecinos de Castellote como para los de Mas de las Matas, el fallecido y los dos heridos son unos completos desconocidos.

Un empleado del bar al de Castellote al que fue a buscar ayuda uno de los heridos afirma que no le había visto nunca. Lo describe como una persona de unos 30 años, alta y corpulenta. Señala que, al ser preguntado por los clientes del establecimiento por el origen de sus múltiples heridas de arma blanca, respondió con la poco creíble historia de que había recibido una paliza tras una discusión de tráfico en una carretera de acceso a la localidad. Su coche quedó aparcado en la plaza de España y las manchas de sangre eran evidentes en los dos asientos delanteros.

Una consecuencia indeseable de la despoblación es la existencia de amplios espacios sin presencia humana que propician la aparición de fincas dedicadas a cultivar marihuana destinada al tráfico de drogas. En Castellote, la Guardia Civil busca por tierra y aire la plantación en la que podrían trabajar los implicados en la pelea, pero en la localidad llueve sobre mojado porque el año pasado fue desmantelada otra plantación con 10.000.

Mientras la supuesta plantación podría estar situada ahora en torno al pantano de Santolea, la de hace un año estaba cerca de otra pedanía, Abenfigo. El operativo policial para tratar de localizar el cultivo clandestino y a posibles implicados en los apuñalamientos que hayan huido continuará este domingo.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión