planes de ocio

Cinco curiosidades del hotel Royal Hideaway de la Estación de Canfranc

Este edificio de 1928 es Bien de Interés Cultural y cuenta con una gran historia a sus espaldas... y muchas curiosidades.

El Royal Hideaway Estación de Canfranc ya está en funcionamiento. El complejo hotelero del grupo Barceló con 104 habitaciones es la nueva incorporación al selecto club de los hoteles de cinco estrellas de Aragón y se ha colado en el listado de grandes aperturas de hoteles de lujo de 2023 del Financial Times.

Su impresionante ubicación rodeada de montañas en pleno Pirineo y, sobre todo, su grandiosa arquitectura, hacen de este hotel un lugar único. El edificio de la antigua estación internacional, lugar que ahora alberga al hotel, fue inaugurado en 1928 y es “uno de los más espléndidos de Europa”, según este diario británico. Este edificio fue uno de los primeros de España construidos en hormigón, piedra y cristal y tiene un techo cubierto de pizarra. Su fachada simétrica de 241 metros cuenta con 424 ventanas, (más que días del año) y 156  puertas.

Este viernes abre al público el Royal Hideaway Hotel, situado en el edificio de la antigua estación de Canfranc.

La recuperación de esta icónica estación ha recibido, entre otros premios el premio Re Think Hotel como uno de los mejores proyectos de sostenibilidad y rehabilitación hotelera realizados en España y esconde secretos que pocos conocen:

El Vestíbulo

Imagen del vestíbulo de la Estación
Imagen del vestíbulo de la Estación
Barceló

La recepción del hotel es uno de los espacios más espectaculares del edificio. Ocupa el espacio del antiguo vestíbulo de pasajeros de la estación y es de uso público. Este lugar se comparte tanto por clientes como por viajeros del Canfranero ya que se puede atravesar para acceder a la moderna estación que se encuentra a la espalda del edificio.  En 2018, la Escuela Superior de Conservación y Restauración de Bienes Culturales de Aragón, recibió el premio Golden por la restauración de esta zona. 

Las lámparas

Acceder al imponente vestíbulo de la estación supone sumergirse en la historia de este edificio, el único lugar de España que fue ocupado (en parte) por los alemanes durante la Segunda Guerra Mundial. En esta área central destacan las ocho lámparas originales de 1928. Piezas únicas de principios de siglo que han recuperado su esplendor original gracias al trabajo de la Escuela Superior de Conservación y Restauración de Huesca y que tienen nombre propio: Jorge, Valero, Vicente, Lorenzo, Pilar, Jara, Salas y Cilles.

Las habitaciones

Así son las habitaciones del hotel
Así son las habitaciones del hotel
Barceló

De las 104 habitaciones del hotel Royal Hideaway hay cuatro que son especiales. Las 'suites' que están situadas en los torreones y que recibirán nombres de personajes que han formado parte de la historia de este edificio: una de ellas lleva el nombre de Albert Le Lay, jefe de la aduana francesa que escapó de los nazis en 1943 cuando fue ocupada. Otra, tiene el nombre del constructor vasco Domingo Hormaeche Bustinza que levantó el edificio en 1928.

Vagones restaurante

Imagen de cómo serán los vagones restaurante
Imagen de cómo serán los vagones restaurante
Grupo Barceló

Eduardo Salanova y Ana Acín, dos expertos en alta cocina, hasta ahora al frente de La Venta del Sotón y Espacio N serán los directores gastronómicos del hotel. Los platos se servirán en varios restaurantes, pero uno de ellos es especial. Se trata de dos vagones históricos de la estación, reconvertidos para acoger un espacio gastronómico y otro a la carta con matices franco-aragoneses. Todavía no es posible comer en ellos. Se están dando los últimos toques a la restauración, en breve, estarán situados en la parte trasera de la estación.

Zona spa y una biblioteca muy especial

Así es el spa
Así es la zona del spa
Barceló

Junto a estos restaurantes, el hotel cuenta con dos bares y una biblioteca muy especial donde también se podrá degustar una amplia oferta de cócteles. Otro de los lugares de visita imprescindible para los que se alojen en este hotel/palacio es la zona spa, que pronto estará en funcionamiento, y que cuenta con una piscina termal, un gimnasio y cuatro zonas de tratamiento.

Zonas verdes con historia y abiertas al público

Imágenes de la inauguración de la nueva urbanización de la estación.
Imágenes de la inauguración de la nueva urbanización de la estación.
Verónica Lacasa

Algunas de las curiosidades de este hotel solo las podrán disfrutar quienes se alojen allí. Pero la construcción de este edificio ha supuesto la apertura de nuevas zonas verdes en Canfranc-Estación donde se encontraba la playa de vías de la explanada de los Arañones. Este espacio público es un recorrido por la historia del ferrocarril donde se pueden apreciar las vías, los cambios de agujas y las básculas que fueron usadas durante mucho tiempo. Pero, además, los más pequeños descubrirán tres toboganes situados en unos montículos y que forman parte de las nuevas incorporaciones a la zona.

Con los dos escudos en su fachada

La estación de Canfranc fue declarada Bien e Interés Cultural en 2002 y forma parte del Patrimonio Cultural Ferroviario. Su recuperación es un proyecto muy esperado por los aragoneses. La fachada de la estación incluye dos detalles únicos: en ella es posible ver los escudos de Francia y España, uno en la parte Norte y otro en la parte Sur del edificio.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión