La unión de Astún y Candanchú estará en obras en la primavera de 2025 para abrir a final de ese año
Idom, EID y Ardanuy optan a redactar el proyecto, que estará listo en verano. El Gobierno de Aragón tendrá contratista en otoño para cumplir el calendario de la UE.
La unión de las estaciones de Astún y Candanchú estará en obras en la primavera del próximo año, lo que garantizará que los esquiadores puedan subirse a la futura telecabina a principios de la temporada 2025/2026 si se cumplen a rajatabla los plazos. Así lo tiene previsto el Gobierno de Aragón, que confía en adjudicar los trabajos antes de que finalice este ejercicio y, de este modo, poder justificar el 50% del gasto con las facturas del material necesario, tanto las pilonas como las cabinas del sistema de transporte por cable.
El cumplimiento de ese hito es imprescindible para poder percibir los 10 millones de euros de subvención otorgados por la Unión Europea para esta actuación valorada en un total de 26. Y no se podrá descuidar porque el plazo para acreditar el 100% de la intervención expirará en marzo de 2026. Es decir, solo se tiene un colchón de entre tres y cuatro meses para hacer frente a imprevistos a una obra que debe acometerse en alta montaña.
El primer paso se dará en marzo con la adjudicación del proyecto y del resto del Plan de Interés General (PIGA) de la unión, por cuya redacción pujan las ingenierías Idom, EID y Ardanuy. Las ofertas técnicas se abrieron a finales de enero y se procederá con las económicas en los próximos días, por lo que Turismo de Aragón estará en condiciones de elevar su informe a lo largo de este mes a la entidad pública adjudicataria, la Mancomunidad del Alto Valle del Aragón.
La consultora que se imponga en la licitación dispondrá entonces de cuatro meses para preparar toda la extensa documentación, que incluye una memoria justificativa de la viabilidad, los planos de información, ordenación y el proyecto básico, el plan de etapas y un estudio económico-financiero.
El director general de Turismo, Jorge Moncada, apuntó que el proyecto de ejecución y la construcción de la telecabina se podrá así sacar a concurso a lo largo del verano y adjudicarse antes de fin de año, lo que resulta clave para la financiación.
La resolución de la convocatoria de 2021 del plan de sostenibilidad turística, sostenido con fondos públicos, obliga a las administraciones a justificar el 50% de la inversión antes del 31 de diciembre de 2024 y el 100%, en marzo de 2026. Moncada aclaró que para cumplir el primer hito no hará falta empezar las obras, dado que con presentar el coste del proyecto y las millonarias facturas por los elementos que forman la telecabina se cubrirá «con toda seguridad» la mitad de la cuantía de la actuación.
El resto de la financiación no será un problema, dado que con el convenio firmado en su día se comprometió la Diputación Provincial de Huesca a aportar 3 millones y el Gobierno de Aragón a cubrir el dinero restante necesario, en torno a los 13 millones. La cuantía podría reducirse en función de las bajas económicas que se lleguen a ofertar.
El director general de Turismo manifestó que la obra civil, con las cimentaciones de las pilonas, empezará en la primavera de 2025, una vez haya acabado la temporada de esquí en Astún y Candanchú. Y para entonces, la adjudicataria ya habrá redactado el proyecto de ejecución.
Ocho meses de plazo
El plazo se ha establecido en ocho meses, por lo que si no hay incidencias la unión de las estaciones debería ser una realidad para finales de 2025, es decir, dentro de dos temporadas. Lo que aún está por decidir es si se instala una telesilla de cuatro plazas o una cinta transportadora cubierta para conectar la estación de Candanchú con la base de la telecabina, desplazada a unos 200 metros para que el tendido no afecte a las viviendas del entorno. La estación intermedia se ha previsto en el área de la telesilla Pastores, ya en el dominio esquiable de Astún, desde donde se podrá seguir hasta la Raca.
El tendido alcanzará los 2.450 metros de longitud y superará un desnivel de algo más de 500 metros, dado que la estación base de Candanchú se sitúa en la cota a 1.508 metros y la de Astún estará a 2.038 metros. Entre medias se instalarán 16 pilonas de hasta 50 metros de altura.
La telecabina de Benasque, a concurso este mes
La construcción de la telecabina proyectada para conectar Benasque y la estación de Cerler saldrá a concurso este mes de febrero con la previsión de ponerla en servicio a principios de 2025. Así lo aseguró el alcalde, el popular Manuel Mora, quien está pendiente de recibir la ampliación en curso de la financiación europea para cubrir íntegramente su coste, 16,1 millones, imprescindible desde el punto de vista legal para poder licitar.
Con los plazos habituales de tramitación administrativa, la resolución culminará en primavera y la contratista dispondrá de ocho meses para acometer los trabajos, de forma que la infraestructura se podrá estrenar con la próxima temporada avanzada.
Los esquiadores podrán dejar sus coches en el municipio, evitando los atascos, ya que la infraestructura, con dos kilómetros de longitud, salvará la sinuosa carretera de subida.
Lo que tendrá que esperar es el aparcamiento asociado, dado que los terrenos son inundables y está condicionado a los informes de la Confederación Hidrográfica del Ebro. El alcalde confía en solventarlo con la ejecución de las defensas del municipio frente a crecidas, pendiente de financiación. En todo caso, el diseño, construcción y explotación del parquin saldrá a concurso, ya que no está ligado a la financiación comunitaria de la telecabina.
El resto de proyectos turísticos financiados con la convocatoria de 2021 estarán acabados este año al estar en ejecución. El Ayuntamiento de Daroca dispone de 2 millones para adecuar la muralla y el castillo, además de la antigua estación para uso turístico. Y la comarca del Matarraña, con 1,67 millones, promoverá un parque de ocio activo para familias y la mejora de la vía verde Val de Zafán
