Azcón y Chueca reivindican un presidente de Aragón “que quiera a Zaragoza”

El ‘ticket’ electoral del PP que conforman Jorge Azcón y Natalia Chueca ha iniciado la campaña de la mano para reclamar el voto conjunto el próximo día 28. Los candidatos a la DGA y al Ayuntamiento de Zaragoza, respectivamente, han prometido colaboración entre ambas instituciones si gobiernan frente a los “ataques” que a su juicio está perpetrando el presidente de Aragón, Javier Lambán, contra el Consistorio de la capital.

“Queremos trabajar juntos, necesitamos un presidente de Aragón que quiera a Zaragoza” frente a un cuatripartito que “ha atacado proyectos estratégicos” de la ciudad, ha señalado Chueca. Por ello, Azcón ha ofrecido “municipalismo, colaboración y lealtad institucional” con la capital aragonesa, pero también “con todos los ayuntamientos, independientemente de su color político”.

El candidato a la Presidencia de Aragón ha apostado por un “cambio político” en la Comunidad. En su primer acto de campaña tras la pegada de carteles, Azcón no ha desvelado nuevas promesas y ha centrado su discurso en recordar las bases de su candidatura: política fiscal, sanidad y críticas al ‘sanchismo’.

El líder del PP ha vuelto a cargar contra el “infierno fiscal” que asegura que sufre Aragón. Ha anticipado rebajas de impuestos, siguiendo la fórmula de las comunidades donde gobiernan los populares, como Andalucía o Madrid. Y ha reiterado que esa política no irá en detrimento de los servicios públicos.

Azcón ha denunciado la gestión de estos últimos años del gobierno de Lambán, que deja, ha criticado, “las peores carreteras”, una baja inversión en gestión forestal y recortes en sanidad, que se han traducido en más listas de espera. “Es la tercera comunidad que menos invierte en gasto social”, ha advertido.

Finalmente, ha acusado al secretario general de los socialistas aragoneses de tener escasa “capacidad de influencia” tras “perder” proyectos como la fábrica de baterías o la Agencia Espacial Española. También por “poner en riesgo” las obras del pacto del agua o la unión de estaciones, que “gracias a los líos del PSOE no verá la luz si no hay cambio de gobierno”.

De igual modo, ha enfatizado que por mucha distancia que marque Lambán con Pedro Sánchez en sus declaraciones, “son lo mismo”, en referencia a las críticas del aragonés por pactar con Bildu tras conocerse que presenta listas electorales con condenados por terrorismo. “No nos van a engañar ni lo vamos a olvidar, a los votantes del PSOE que piensan que es nauseabundo que lleven asesinos en sus listas, el PP es la única alternativa”, ha concluido Azcón.

Dos modelos

Por su parte, Natalia Chueca ha polarizado la campaña municipal en dos modelos: el de la parálisis o el de la prosperidad. Para la candidata popular, Zaragoza sufrió un retroceso en la década posterior a la Expo bajo los gobiernos de la izquierda, mientras que ha “brillado” en estos últimos cuatro años con la coalición PP-Cs al frente.

Ha resaltado su gestión, con bajadas de impuestos y “mejoras de los servicios públicos”, y ha reivindicado el “desbloqueo” de proyectos “históricos” y la apuesta por políticas sociales. Por contra, ha acusado al PSOE de Lola Ranera de “poner por delante sus intereses a los de la ciudad”. Ha criticado el rechazo de los socialistas a iniciativas como la residencia privada de Pontoneros, el contrato de limpieza pública o la nueva Romareda. Y se ha postulado como única candidatura capaz de “garantizar resultados”, con un proyecto “moderado, de sensatez y para la mayoría de los zaragozanos”.