economía

Alquilar o comprar tras la covid: más pisos de herencias y escasez de obra nueva en Zaragoza

El mercado de vivienda sigue reactivándose tras la pandemia con cifras superiores a 2019. 

Vista panorámica desde la última planta del edificio de Torre Zaragoza.
Vista panorámica desde la última planta del edificio de Torre Zaragoza.
Toni Galán

El alquiler de vivienda ha vuelto a cobrar protagonismo esta semana con el anuncio de un proyecto para construir 500 viviendas para jóvenes en la Expo, avanzado por el presidente del Gobierno aragonés, Javier Lambán, durante el debate sobre el estado de la comunidad. Desde el sector inmobiliario ven con buenos ojos el aumento de la oferta de pisos en arriendo, que escasean a precios asequibles, pero alertan de que del lado de las compraventas también se acaba el parque de obra nueva, diezmado aún por la crisis de 2007, y se reduce el de usada en buen estado porque la pandemia de covid-19 ha renovado el interés por cambiar de casa a quienes han mantenido sus ingresos.

Para los agentes de la propiedad inmobiliaria, el perfil del inquilino no ha variado pese a la crisis sanitaria. "Quienes quieren piso en arriendo siguen siendo las personas que se trasladan de ciudad y la gente joven que aún no tiene el 25% o 30% de ahorro para comprar piso", asegura Fernando Baena, presidente del Colegio Oficial de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria. Ser propietario se convierte cada vez  en una opción más lejana, al unirse salarios bajos y precarios en los jóvenes y la necesidad de disponer de ahorros para conseguir una hipoteca. 

Mónica y David, 30 y 33 años: "Queríamos el alquiler para hacer colchón y algún día comprar nuestra propia casa"

Primer paso para comprar

A diferencia de la anterior crisis, la inmobiliaria de 2007, en esta hay financiación de la banca, pero sin la barra libre de entonces, cuyas consecuencias aún se arrastran. Ahora para firmar una hipoteca es necesario un contrato fijo y ahorros que rondan el 20% o el 30% del precio del piso. Por ello, otro perfil es el de los jóvenes que se plantean alquilar para ir ahorrando, como el caso de Mónica Almaraz y David Ares, que viven desde este mes en el barrio zaragozano de  Valdespartera. "Queríamos el alquiler para hacer colchón y algún día comprar nuestra propia casa", cuenta la joven de 30 años, que junto a su novio de 33 acaban de regresar de Amsterdam, donde han estado un tiempo viviendo y trabajando.

Han firmado un alquiler de 750 euros al mes, en el que han valorado que es una zona "joven y hay buen ambiente". Miraron también por el centro, pero en el barrio han podido alquilar con menos de su presupuesto, que llegaba a los 900 euros, una vivienda con una habitación más, que necesitaban para teletrabajar.

Loading...

Ella es de Salamanca y él de Zaragoza y ya habían residido antes en la capital aragonesa. Al regresar de Holanda han podido mantener sus empleos, ella el que dejó aquí y él mediante teletrabajo. Otra de las razones de alquilar ha sido "no estar atados a un sitio porque no sabemos dónde estaremos definitivamente", confiesa, aunque Zaragoza les parece una ciudad cómoda para residir y comprar piso.

Precisamente por ese deseo de no echar raíces empieza a haber también inquilinos por convicción, que se alejan de la afirmación de que España es un país de propietarios. "Nosotros preferimos el alquiler porque nos movemos mucho. Comprar es más una atadura", cuenta Hernán, madrileño de 52 años, de abuela turolense, que vive con su pareja desde hace tres años en Zaragoza, donde regenta un restaurante en el centro. "Yo cambio mucho de lugar por trabajo y porque me gusta viajar", afirma, tras haber vivido en Madrid, Canarias, Extremadura y, justo antes de llegar a la capital aragonesa, en Inglaterra. Alquilar tampoco es fácil si no se cuenta con una nómina como les ocurrió cuando volvieron a España.

Hernán, 52 años: "Nosotros preferimos el alquiler porque nos movemos mucho. Comprar es más una atadura"

No concibe estar hipotecado 20 ó 40 años aunque una cuota hipotecaria pueda resultar más barata que un alquiler. En el último informe de Tecnocasa se apuntaba que para un piso medio de 95.000€ (67 metros cuadrados), financiando 76.000€ (80%) a un tipo fijo de 1,5% a 25 años, la cuota mensual de una hipoteca sería de 341euros, mientras un alquiler llegaría a 590 euros.  "No sabes la tranquilidad que da y la libertad que me da poder decir que me voy", cuenta sobre la diferencia con la vida de hipotecado. Ya vivió de cerca en la crisis anterior cómo algún familiar se quedó con un piso por el que debía más de lo que valía, sin poder venderlo cuando le surgió una oportunidad de trabajo en el extranjero. No ha tenido problemas por estar de alquiler, al contrario, durante la pandemia ha contado con el apoyo de su casero.

Fernando Baena, presidente API: "La vivienda en alquiler asequible sigue siendo escasa. En pisos de 500 a 700 euros falta oferta"
Fernando Baena, presidente del Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria (API) de Aragón.
Fernando Baena, presidente del Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria (API) de Aragón.
Aránzazu Navarro

"La vivienda en alquiler asequible sigue siendo escasa. De pisos de 500 a 700 euros, que es el requerido, es donde falta oferta. Si está bien situado y es moderno o habitable, escasea", señala Baena. Eso lo saben quienes  buscan y viven enganchados a las alertas del móvil. Habría unos 1.000 pisos en alquiler en Zaragoza según el portal idealista.com.

En agencias como Aldebre Inmobiliaria hacen un balance del año "mucho mejor de lo que esperábamos", señala su responsable, David López,  ya que superaran las 100 operaciones, entre ellas las de la pareja de  jóvenes en Valdespartera, donde también ha cerrado esta semana una venta, una cifra que no han alcanzado en sus 15 años de trayectoria.  En el mercado de alquiler ve "buenas noticias" porque los precios han empezado a bajar para los arrendatarios por varios factores. "Hay bastante oferta, la entrada de pisos de herencias ya se nota porque hay muchos herederos que se están decidiendo por alquilar" en busca de la rentabilidad, señala, desde la asociación de inmobiliarias Aportalia. Este último grupo sería consecuencia de la huella dejada por la pandemia. "Se alquila lo que está bien y a precio y el resto ahí se queda", afirma López. Baena nota también más vivienda heredada para la venta. 

David López, Aldebre: "Hay bastante oferta, la entrada de pisos de herencias ya se nota porque hay muchos herederos que se están decidiendo por alquilar"
David López, de inmobiliaria Aldebre.
David López, de inmobiliaria Aldebre.
Heraldo.es

López encuentra también entre los inquilinos a quienes cambian de casa y "en vez de vender la nueva la están alquilando", añadiendo oferta al mercado. Considera que a bajar precios ha ayudado el plan del ayuntamiento con el sector que ofrece ayudas a quienes reformen pisos para ponerlos en alquiler si rebajan su precio un 20%. "Salen pisos de 70 metros de entre 380 a 480 euros de media". En Zaragoza el precio ha bajado de media un 4,54% hasta los 7,06 euros por metro cuadrado en octubre, respecto a doce meses antes, según el último informe del portal inmobiliario pisos.com.

"El que tiene claro cuál es su residencia habitual y tiene posibilidades, tiene intención de comprar", insiste Baena. Y ello se refleja en el número de compraventas. "El mercado va bien el tercer trimestre, aunque no vaya a ser tan bueno como el segundo", avanza. El colegio presenta con la agrupación de inmobiliarias que forman Miragon.es el informe del tercer trimestre del año esta semana, elaborado por Gamerin. En el anterior (entre abril y junio) se firmaron 4.000 compraventas en Aragón,  el mejor dato desde el tercer trimestre de 2010 y un total de 13.902 en doce meses.

 "Zaragoza es un mercado más estable. Este último año hemos tenido más oferta de alquiler que el año pasado", asegura Lázaro Cubero, director de Análisis del Grupo Tecnocasa. En su último informe ha destacado el "alto número de ventas" y precios moderados en la capital. El mayor volumen de pisos vendidos en la ciudad está en la franja de 75.000 a 150.000 euros, con un 50,8% del total.

Pisos nuevos

"Quien ha conservado el empleo incluso le da más importancia a la casa que antes de la pandemia. Quien tiene empleo y ahorros está en actitud compradora, sobre todo, de obra nueva, que prácticamente está vendida", añade Baena. Esta escasez impulsaría las ventas de pisos usados, que son siempre las mayoritarias en un mercado todavía con cicatrices desde la crisis inmobiliaria de hace 14 años. "Ha bajado el 'stock' de vivienda de segunda mano a la mitad", afirma López. "El comprador que tiene prisa, que compraría obra nueva, se va a la segunda mano porque no hay o lo poco que hay ha subido mucho de precio". 

Juan: "La búsqueda para comprar ha sido ardua porque me han notificado muchas alertas, pero en muchos casos me citaban y no llegaba a ir por haberse vendido el piso antes"

Juan (nombre ficticio), ha firmado esta semana una hipoteca y ha comprobado cómo el mercado se mueve. Se apuntó a todos los portales inmobiliarios pero era difícil 'cazar' un buen piso. "La búsqueda para comprar ha sido ardua porque me han notificado muchas alertas, pero en muchos casos me citaban y no llegaba a ir por haberse vendido el piso antes. Si están bien se venden en el primer día", asegura. En su caso, se centraba en Valdespartera porque allí reside su ex pareja, con la que comparte la custodia de sus hijos. En el barrio que consiguió terminar de edificarse antes de que pinchara la burbuja de 2008 "todos son de VPO y apenas hay libres". Entre los más grandes están los de 90 metros cuadrados, por unos 150.000 euros.

"El número de inversores que están comprando en Zaragoza está en niveles de ciudades como Madrid, con un 28%"

Desde Tecnocasa creen que el mercado está con un número de compraventas "muy interesante",  por encima de las de 2019, destaca Cubero. Cree que los precios son "moderados" en la capital aragonesa. Esto hace que la rentabilidad de alquilar o comprar para alquilar sea mayor que en otras ciudades. "El número de inversores que están comprando en Zaragoza está en niveles de ciudades como Madrid, con un 28%", apunta. Se trata de ahorradores locales y otros llegados de otras capitales. 

Desde Aldebre, López asegura que es "momento para vender el que esté pensando hacerlo" porque "hace falta en el mercado" y se le puede sacar "más rentabilidad que en alquiler porque estos están bajando y hay más oferta". Sin embargo, la opción de comprar para alquilar sigue pesando.

Entre los riesgos estaría que se mantenga el incremento de la inflación, actualmente en el 5,8% en Aragón en octubre, que el sector espera que sea coyuntural. La obra nueva se encuentra también amenazada por la subida de los materiales en los mercados internacionales.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión