trucos de hogar

Cómo hacer los mejores cubitos de hielo en casa y almacenar ¡hasta 1.200 unidades! en el mínimo espacio

Las bolsas de hielo caben en cualquier rincón del congelador y puedes llenar tantas como necesites para tener los cubitos de hielo listos cuando los necesites.

Es un básico en cualquier congelador y más en estos días.
Es un básico en cualquier congelador y más en estos días.
Pixabay

La guerra de Ucrania, el alto precio de la gasolina, la sequía... Todos estos temas nos preocupan (¡y mucho!), pero si hay un tema que está presente en las conversaciones de ascensor y llena de 'memes' las redes sociales, ese es la escasez de hielo. El excesivo calor de este verano y la falta de almacenamiento han convertido esos cubitos de agua congelada en un objeto de lujo que escasea en los supermercados y gasolineras.

Estamos en época de fiestas en casi todos los pueblos y ciudades de Aragón y las hemos cogido con muchas ganas. ¡Solo hay que ver el éxito de público de las fiestas de San Lorenzo! En estos días de reuniones de amigos, copas y cafés con hielo no podemos quedarnos sin abastecimiento de cubitos así que lo mejor es prevenir y contar con herramientas que nos permitan elaborarlos en casa de forma fácil y disponer de ellos cuando más los necesitemos. Podemos apostar por comprar una máquina para hacer hielo o rescatar del fondo del congelador los viejos moldes de silicona. Pero hay un sistema que ocupa poco espacio y nos permite tener todo el hielo que necesitemos sin tener que rellenar constantemente las cubiteras. Se trata de las bolsas de toda la vida. Es un clásico muy económico que podemos guardar en el cajón y llenar cuando necesitemos sin que se desparrame el agua en el congelador. Sencillo, efectivo y económico.

Cada bolsa de hielo contiene 24 cubitos.
Cada bolsa de hielo contiene 24 cubitos.
Amazon

A 0,26 la unidad. El 'pack' con mejor precio que hemos encontrado en Amazon tiene 50 bolsas con capacidad para 24 cubitos cada una, y todo por 8,99 euros. Estos hielos no son tan grandes como los industriales, pero cumplen sobradamente su función.

El sistema es muy sencillo: llenamos la bolsa con agua y la giramos para que se cierre de forma automática así evitamos las fugas. Las podemos colocar en cualquier posición en el congelador ya que al estar cerradas no se escapa el agua. Después, solo tenemos que esperar unas horas para poder utilizarlas. 

Estas bolsas tienen otra ventaja y es que mantienen el hielo alejado del resto de alimentos y evitan que se pegue el olor y el sabor. Además, permiten congelar no solo agua, sino caldo, bebidas y zumos. Cada cubito se retira de forma individual y la hora de servir podemos disponer la cantidad que necesitemos y dejar el resto en el congelador. 

Consejos para hacer los mejores cubitos caseros

  • Utiliza agua de calidad. En Zaragoza, por ejemplo el agua es muy dura así que es buena idea usar agua mineral o filtrada para evitar la presencia de virus y bacterias, además conseguirás que sepa mejor.
  • Elimina las impurezas: si usas agua del grifo, hiérvela primero antes de introducirlas en las cubiteras para eliminar el oxígeno y las impurezas.
  • Espacio fijo en el congelador. Busca una zona específica lejos de alimentos agresivos como las carnes o pescados para evitar que los cubitos absorban su olor.
  • Si tienes prisa, usa agua caliente. El agua caliente contiene más enlaces de hidrógeno que el agua fría y su energía se expulsa más rápido. Esta cualidad es conocida como 'efecto Mpemba' así que si pones en la bolsa agua caliente se congelará mucho antes. 

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