Esto es lo que debe tener tu kit de supervivencia para posibles... imprevistos
Agua, alimentos no perecederos, velas, linternas y pilas no deberían faltar en un paquete de esenciales domésticos para sobrellevar cualquier situación inusual que cambiara los hábitos del día a día.
Filomena, grandes tormentas, la erupción de un volcán, una pandemia... no son pocas las situaciones que en los últimos tiempos han hecho cambiar los hábitos de vida. Tanto que seguro que muchos, al hacer la compra, tienen en mente contar con algún alimento no perecedero que llene las estanterías de su despensa, por si las moscas.
No es una cuestión menor. De hecho, nutricionistas y expertos en supervivencia recomiendan ser previsores ante posibles imprevistos para poder sobrellevar de la mejor manera posible situaciones inusuales.
"La pandemia ha hecho que nos acostumbremos a comprar más latas y conservas para tener en casa. Eso está bien, pero hay que tener en cuenta que la legumbre o la verdura es mejor guardarla en bote de cristal. En lata, si se abre y no se consume de manera inmediata puede favorecer la creación de una toxina, la clostridium botulinum, que puede llegar a ser perjudicial para la salud", explica la nutricionista Alejandra Bastarós. Atún, bonito, sardinas y cualquier otro tipo de pescado, "estos sí, siempre enlatados porque son de consumo rápido porque se venden en cantidades más pequeñas", apunta Bastarós, también deberían incluirse siempre en un kit de alimentación saludable para posibles imprevistos.
En cuanto a los alimentos frescos, "la fruta, por ejemplo, podríamos adquirirla deshidratada porque sería saludable igualmente, solo que se corre el riesgo de consumir cantidades excesivas". "Hay que tener en cuenta que lo que se conoce como orejón es un melocotón entero, por ejemplo", apunta la nutricionista, quien asegura que ella opta "por los frutos secos". En cuanto a la carne, envasada al vacío y curada, como el jamón o el lomo embuchado "también son una buena opción". Yogures que no necesitan frío, pasta, arroz, leche, agua y huevos "que aguantan mucho fuera del frigorífico", conformarían, según la nutricionista Alejandra Bastarós la lista de imprescindibles para guardar en la despensa.
¿Y qué hacer ante un corte de luz? "Hasta hace relativamente pocos años, más en los pueblos que en las ciudades, el corte de suministro de energía, por malas condiciones meteorológicas la mayoría de veces, era normal. No pasaba nada. Nos hemos acostumbrado a lo bueno y sin luz también podríamos aguantar unos días", asegura Chus Montañés, de la Escuela de Supervivencia Rumbo Oeste.
Abrir las cortinas para aprovechar los rayos del sol, velas y linternas, sin olvidar pilas para su funcionamiento, son las opciones más sencillas para pasar el día "sin problemas". "Mantener el calor en invierno ya es otra historia. Las estufas de butano, de queroseno o de parafina, que calientan muy rápido, son una buena alternativa, aunque ahora su precio ha subido por el falta de abastecimiento y la incertidumbre del qué pasará", apunta Montañés. "Si es un momento puntual, que no se alarga en el tiempo, más asequibles son, sin duda, una buena manta térmica o un saco de dormir".
Con la despensa ya llena y bien abrigados, para muchos podría estar todo solucionado. Incluso agradecerían que la batería de sus móviles o portátiles llegara a su fin en algún momento. Para otros, en cambio, esta situación podría suponer un problema. "La solución más práctica, unas baterías solares totalmente indispensables para completar el kit", aconseja Chus Montañés. "Eso sí, ahora las que hace unas semanas rondaban los 17 euros, están a 57", concluye la experta en supervivencia.
