investigación
Los españoles beben menos alcohol que la media europea
Un estudio del Instituto DYM revela que el 18% de los encuestados afirma tomar alcohol con frecuencia y que han desarrollado más este hábito los hombres (21,8%) que las mujeres (12,8%).
El 18% de los españoles afirma beber alcohol con mucha o moderada frecuencia, lo que supone seis puntos más que en la anterior oleada del estudio de hábitos de consumo y salud realizada hace dos años. Este leve incremento, que es más acentuado entre los hombres, sigue sin situar a España entre los mayores consumidores de alcohol, aunque lo acerca la media europea, que se estabiliza en torno al 20%.
El Instituto DYM, en colaboración con WIN International, asociación mundial en investigación de mercado, han hecho públicos datos sobre los hábitos de vida y salud de los ciudadanos en muy diversos aspectos: el estrés, las dietas, el tabaco, el ejercicio… En lo relativo al consumo de alcohol hay una serie de datos interesantes como el que señala que el 48% de los españoles consume muy poco alcohol o lo hacen muy ocasionalmente. El estudio se ha llevado a cabo con la intención de explorar las opiniones y creencias de 29.575 personas de 40 países y en España el Instituo DYM completó 1.017 entrevistas 'online' realizadas en noviembre de 2019.
De la investigación se deduce que la frecuencia de consumo de alcohol es mayor en hombres (21,8%) que en mujeres (12,8%) y que también es una costumbre más extendida entre las personas más jóvenes. El pico lo alcanzan los jóvenes de entre 18 y 24 años (un 22,4% de los encuestados de esa franja dice beber con frecuencia) y conforme se va avanzando en edad y madurando parece que el afán por el alcohol va quedando atrás. Así, entre los 35 y 44 años es tan solo un 16,2%, que baja aún más entre los 45 y los 54 años (un 12,2%) y sufre un leve repunte ya en la edad más adulta con un 18,4% cuando se está a las puertas de la jubilación.
Los españoles, además, ocupan una zona media de la tabla en lo que a consumo de alcohol se refiere comparado con países del entorno. Aunque parece que sus habitantes lleven peor fama (por algunas imágenes de fiestas de verano y por los botellones en la calle), en España no se toma más alcohol que en Francia, Grecia o Gran Bretaña. Es más, España está un poco por debajo de la media europea, pues si aquí es un 17 el porcentaje de la población que dice beber con cierta frecuencia la media de los países de la UE eleva la cifra al 20%. Alemania está en esa tesitura y, a pesar de su tradicional fama por la fiesta de la cerveza, los germanos también pasan desapercibidos si se les compara con la parte alta de la gráfica: son los japoneses los más aficionados al alcohol (hasta un 48%), los australianos no se quedan atrás (un 31%) y los estadounidenses también beben más que los europeos, un 24% de los encuestados dice hacerlo a menudo. Es significativo el bajo índice de Italia (8%) y también los países de América Latina (Brasil está en el 11% y Argentina en el 9%).
Otro dato curioso que arroja el estudio es que conforme más y mejor formación académica se tiene mayor es también la tendencia a beber -acaso- por la necesidad de socializarse o por la mayor disponibilidad económica. Llama la atención que en la gráfica apenas el 4% de quienes no poseen estudios elementales dice que tiene costumbre de tomar alcohol con frecuencia y este porcentaje va ascendiendo también en función del grado académico. Así, el 12% de los que tienen estudios de Primaria beben con frecuencia, mientras que los de Secundaria son el 15%, los universitarios hasta son un 19% los que toman alcohol con asiduidad y hasta un 25% quienes han hecho un máster.
También son curiosos los datos en una estadística similar pero referida al mundo laboral. Quienes tienen un trabajo a tiempo completo beben más que los de a tiempo parcial (un 20% frente a un 16), mientras que los desempleados apenas prueban el alcohol: según las cifras solo el 14% es consumidor habitual, una cifra semejante a la de los estudiantes que se sitúa en el 12% de los encuestados.
