El desayuno perfecto para bajar los niveles de azúcar y colesterol
Es importante elegir los ingredientes de manera correcta en la primera comida del día para contrarrestar estos problemas de salud.
La Fundación Española del Corazón explica que el colesterol es una sustancia grasa natural necesaria para el funcionamiento del organismo. No obstante, cuando sus niveles se disparan se pone en riesgo la salud. "Aquellos con niveles de colesterol en sangre superior a 240 multiplican por dos las posibilidades de sufrir un infarto de miocardio en comparación con quienes mantienen cifras por debajo de 200", apuntan desde la asociación, la que también apunta un dato preocupante en España, ya que el pasado año el 50,5% de la población adulta española tenía hipercolesterolemia, es decir, niveles de colesterol por encima de 200 mg/dl.
Así que, es muy importante mantenerlo a raya y para ello hay que controlar el estilo de vida y la alimentación. Y, tener una dieta equilibrada. Al reducir la cantidad de grasas saturadas y trans que comemos y aumentar la cantidad de fibra y proteínas, podemos reducir nuestro colesterol y mejorar nuestra salud en general. Sin olvidar el ejercicio diario y algunos trucos en la comida más importante del día: el desayuno.
Qué desayunar para bajar el colesterol
Si tus niveles de colesterol son muy altos, para evitar problemas debes intentar combatirlos con tu alimentación y hábitos. La Asociación Americana del Corazón y la Asociación Americana de Diabetes proponen algunos de los paltos que puedes incluir en tu desayuno:
- Avena: es considerado uno de los mejores desayunos y es una fuente de hidratos de carbono y una gran aliada contra el colesterol LDL, que se puede comer acompañada con lo que más te guste.
- Tostadas con aguacate: es otro de los desayunos estrella, ya que esta fruta ayuda a bajar el colesterol y aporta grasas más sanas.
- Revuelto de huevo: parece una locura y hay un mito que dice que son malísimos para el colesterol, pero lo malo es pasarse. Comer varios huevos por semana es muy saludable (no cuenta el frito). Así que los revueltos, cocidos, pasados por agua o poché son una gran opción.
- Yogur griego natural: no se podía olvidar este desayuno muy común y con pocas grasas y azúcares, muy efectivo también para la digestión y con muchas combinaciones posibles.
