El menú para hacer una dieta cetotariana y perder peso pero con cuidado

Perder peso de manera saludable es posible. Popularizada desde el año pasado, la rutina denominada cetotariana ha ganado peso en los últimos tiempos. Esta combina rasgos de la dieta cetogénica con la alimentación vegetariana. Virtudes que se traducen en la pérdida efectiva de kilos. Mantener el seguimiento de esta junto a un médico o especialista en nutrición también será importante en la confianza del proceso.

A grosso modo, esta dieta consiste en preponderar el consumo moderado de proteínas, abundante de las grasas y minimizar al máximo el consumo de carbohidratos. ¿Cuál es el objetivo? Que el organismo utilice las grasas como fuente de energía al no encontrarla en la ausencia de carbohidratos. A este proceso se le llama cetosis. Esta es la principal característica de la dieta cetogénica, que aún puede ir más allá a través de la conocida como cetotoriana. La particularidad de esta última reside en la eliminación de la carne de la dieta.

Creada por el experto en medicina funcional Will Cole, la cetotariana sustituye las grasas animales por las grasas de origen vegetal. Asimismo, se priorizarán los alimentos ecológicos. Además, se deberán evitar aquellos alimentos que ralenticen la absorción de nutrientes, como la patata o el tomate -verduras solanáceas-. A caballo con una alimentación vegetariana, la dieta cetotariana permite el consumo en pequeña cantidad de huevos, mantequilla y pescado, mientras se busca la presencia de ácidos grasos Omega 3, las grasas "buenas".

Alimentos que contempla la dieta cetotariana

La eliminación de la carne de la alimentación debe ser compensada para que el organismo reciba todos los nutrientes necesarios para su buen funcionamiento. De este modo, vegetales grasos como el coco, el aguacate o las aceitunas surgen como alternativa. Este tipo de grasa vegetal es vital, puesto que asumirá el 75% del consumo de energía del cuerpo. Por tanto, la ingesta de esta grasa deberá ser abundante. Algunos de los alimentos destacados son semillas de linaza, cáñamo y de chía, fuentes de fibra y ácidos grasos. Una función que cumplen también productos como las nueces, el aguacate o el aceite de oliva. Aunque es una dieta fácil para aquellos personas acostumbradas a planes similares como los veganos, hay eliminar alimentos tofu, debido a su contenido en soja no fermentada.