Casa Emilio, más de 80 años de cocina y platos a menos de 5 euros

En todo este tiempo siempre ha estado muy presente el carácter social de su carta.

Merche Doñate, en la cocina de Casa Emilio
Merche Doñate, en la cocina de Casa Emilio
A. Toquero

Casa Emilio camina paso a paso hacia la conquista de un logro del que pocos establecimientos pueden presumir: su condición de restaurante centenario. Ya son 84 años los que lleva abierto al público en Zaragoza y en todo este tiempo siempre ha estado muy presente el carácter social de su cocina.

Lo recuerda Emilio Lacambra, que se jubiló hace unos cuantos años, pero que se pasa por el restaurante casi a diario. Además, dos días a la semana los tiene marcados en el calendario y son fijos para comer con varias cuadrillas de amigos. "Mi abuela Carmen, en los años 40 y 50 del siglo pasado, ya ofrecía comida a personas que seguramente ese día no hubieran podido llevarse nada a la boca; a las cuatro de la tarde, cuando terminaba el servicio, casi siempre había gente esperando a la puerta", rememora.

Emilio Lacambra: "Mi abuela Carmen, en los años 40 y 50 del siglo pasado, ya ofrecía comida a personas que seguramente ese día no hubieran podido llevarse nada a la boca"

Ese espíritu se siguió manteniendo con el paso del tiempo. Por ejemplo, con la puesta en marcha de campañas de solidaridad a raíz de la crisis de 2008, o trabajando con Unicef y varias organizaciones no gubernamentales ofreciendo menús económicos.

La pandemia fue otro momento crítico en el que Casa Emilio se sumó a la oferta de comida para llevar a precios asequibles. "Elaboramos una carta de platos que tuvieron una gran aceptación", recuerda Emilio.

Otros restaurantes hicieron algo parecido, pero esta iniciativa se ha ido diluyendo tras el regreso a la normalidad. En esta casa de comidas, sin embargo, aunque reconocen que la demanda ya no es tan grande como hace dos o tres años, "hemos decidido seguir ofreciendo recetas sueltas a precios muy comedidos", explica la cocinera Merche Doñate.

Hay bastante donde elegir. Esta semana, por ejemplo, se podían pedir macarrones a la boloñensa (3 euros), menestra de verduras (3,50 euros), judías estofadas (4 euros) o una de las recetas más populares de Casa Emilio, la fritada aragonesa, por 4, 50 euros.

Merche Doñate, llenando un túper con menestra de verduras
Merche Doñate, llenando un túper con menestra de verduras
A. Toquero

El táper se llena hasta arriba así que la ración es muy generosa, "tanto como para que muchas personas nos digan que es suficiente y no necesitan más para comer", relata la cocinera. Otras veces se ofrecen patatas con bacalao, garbanzos a la antigua o lentejas estofadas y bien acompañadas. En definitiva, propuestas bastantes contundentes que encajan perfectamente con la idea de plato único para comer.

"Hay que tener en cuenta –explica Emilio Lacambra– que el perfil de la clientela que más recurre a este servicio es el de personas mayores que no cocinan habitualmente o que tienen problemas de movilidad".

De hecho, en algunos casos de vecinos cercanos a la avenida de Madrid, 35, donde se ubica el restaurante, Casa Emilio les llevan directamente la comida a su domicilio. Merche Doñate añade el detalle de que "los fines de semana cambia algo el tipo de cliente y la gente joven también se anima".

Desde las 11.00 a las 15.00 se pueden hacer los pedidos de platos para llevar (976 434 365 y 674 371 927), que se entregan en el mismo horario de comidas del restaurante, de 13.00 a 16.00.

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