La Jefa, la malvasía poderosa de la familia Matsu
Este blanco con apelativo femenino de la D. O. Toro se suma a los tintos El Pícaro, El Recio y El Viejo.
Con carácter, sabor, estructura y fuerza. Así es La Jefa, el nuevo vino de Bodega Matsu con nombre de mujer que ha sido presentado este lunes por Raúl Acha, director técnico del grupo Vintae, al que pertenece esta bodega, y el CEO de la compañía, Richi Arambarri.
Procedente de viñedos viejos de la Denominación de Origen Toro, La Jefa marca una nueva etapa en la trayectoria de la bodega, que alcanza con este blanco de malvasía su madurez tras desembarcar en esta región desde Rioja, su tierra de origen, en el año 2005.
Matsu es una de las primeras bodegas de la Compañía de Vinos Vintae fuera de tierras riojanas, un camino que abrió el comienzo de la expansión a otras denominaciones y proyectos por toda España en regiones como Ribeiro, Ribera del Duero, Navarra o tierras aragonesas.
La Jefa se elabora a partir de uvas de malvasía castellana, propia de la región de Toro, de viñedos en su mayor parte centenarios y prefiloxéricos, situados en distintas parcelas cuyo elemento en común es el suelo arenoso y el clima continental, que trae consigo frío en invierno y calor intenso en verano. Esta variedad ya fue descrita en el siglo XVI como una uva que da lugar a vinos “olorosos y claros” que “se conservan bien”. Una viticultura ancestral mantenida durante décadas por los diversos viticultores que proveen a Matsu ha permitido la creación de este vino y su expresión natural del terreno.
La Jefa está pegada a la tierra como lo están los otros miembros de su familia, los tintos El Pícaro, El Recio y El Viejo. La primera cosecha, 2018, se produce en un año húmedo y ligeramente fresco, aunque durante la fase final del ciclo la uva maduró a la perfección y dio pie a la elaboración de vinos muy finos y algo más ligeros de lo habitual en Toro. Para elaborar La Jefa se han seleccionado viñedos de muy baja producción sobre terrenos pobres, cultivados de forma tradicional y completamente natural. Se vendimia manualmente y se elabora en fudres de 600 litros, donde también se lleva a cabo su crianza, que en esta añada ha sido de 14 meses.
La imagen de La Jefa es la de una mujer con poderío y la experiencia que le dan los años vividos, sin miedo a mostrarse tal como es y expresarse con orgullo femenino. La imagen que encarna a La Jefa está realizada por la reputada fotógrafa Bèla Adler, que ha sabido captar en la mujer protagonista toda la esencia de un blanco de guarda como este, concebido para expresarse con más intensidad y serenidad con el paso del tiempo, aunque la corta tirada de la edición, poco más de 7.000 botellas, y el ímpetu con que se está vendiendo dentro y fuera de España, indican que no quedarán muchas botellas para comprobar su evolución en el tiempo. Cada botella tiene un precio de alrededor de 20 euros.
En la fase de cata, al principio se presenta con austeridad al llevarlo a la nariz, lejos de la exuberancia mucha veces fingida de la que hacen ostentación muchos vinos blancos nada más descorcharlos. Poco a poco va desplegando auténticas notas frutales, florales y minerales. Es en la boca donde demuestra todas sus cualidades y su elegante complejidad, haciendo gala de una espectacular acidez sobre la que se aposentan los sabores frutales rotundos, muy bien arropados por algunas notas trasmitidas por la madera. Es pleno, redondo, sabroso y untuoso. Un vino nacido para hacer disfrutar.
