economía

Zaragoza competirá por la fábrica de baterías de Stellantis con fondos del Perte VEC e incentivos regionales

El alcance de las ayudas de la UE, los apoyos gubernamentales y la competitividad de Figueruelas, bazas para acceder a una inversión que aún tardará en definirse.

Taller de baterías en la planta de Stellantis en Figueruelas (Zaragoza).
Taller de baterías en la planta de Stellantis en Figueruelas (Zaragoza).
Marcos Cebrián

Con una planta en Figueruelas muy bien posicionada en el grupo Stellantis por sus ratios de calidad y productividad, un convenio colectivo firmado este año que garantiza la paz social hasta 2027, un coche eléctrico en su cadena de montaje desde 2021 (la versión enchufable del Opel Corsa) y otros dos que se producirán en serie en meses –el e-Peugeot 208 desde octubre próximo y el Lancia Ypsilon desde el segundo trimestre de 2024–, Zaragoza optará a la adjudicación de la cuarta gigafactoría de baterías de Stellantis en Europa con importantes fortalezas.

A ellas se unirán y serán también determinantes las ayudas públicas que pueda recibir el proyecto, como ocurrió en las tres fábricas ya previstas por Stellantis en el Viejo Continente, una en Billy-Berclau Dovrin (Francia), que fue inaugurada en mayo pasado, otra en Kaiserslautern (Alemania) y una tercera en Térmoli (Italia).

En el caso de España, que a priori compite con Portugal para hacerse con la gigafactoría, como deslizó en abril pasado el consejero delegado de Stellantis, el portugués Carlos Tavares, serán fundamentales los fondos europeos que la compañía pueda recibir en la segunda convocatoria del Perte del vehículo eléctrico y conectado (VEC), a la que se ha presentado el grupo tanto en la línea de baterías (cuya dotación total se eleva a 850 millones de euros) como en la destinada a la cadena de valor, que suma 344 millones y 215 millones en préstamos. Según fuentes consultadas por este diario, Stellantis aspira a hacerse en esta puja –que se resolverá en los próximos días– con entre 150 y 200 millones de euros, si bien también podría optar a las ayudas del Perte VECIII, cuya convocatoria ha sido anunciada ya por el ministro de Industria, Héctor Gómez.

A estas ayudas uniría Stellantis las que puedan aportar los Gobiernos de España y de Aragón, este último a través de incentivos regionales, como se ha hecho en otras ocasiones para importantes inversiones empresariales de estas características.

El Ejecutivo aragonés, con su presidente, Jorge Azcón, y la vicepresidenta segunda y consejera de Economía, Mar Vaquero, a la cabeza, se han manifestado a favor de adoptar todas las acciones oportunas para que esta inversión llegue a Zaragoza. "Tienen que ser las empresas las que hablen de sus apuestas y dónde quieren materializarlas, pero nosotros vamos a trabajar con seriedad y con profesionales más que cualificados y que son incuestionables por la trayectoria que han tenido, lo que va a ayudar mucho a que Aragón sea una tierra atractiva para que se pueda implantar una fábrica de baterías", dijo Azcón el pasado lunes al ser preguntado por el proyecto de Stellantis antes del inicio de la Cumbre Empresarial de CEOE Aragón.

La figura de Antonio Cobo

Como profesional "más que cualificado" el presidente se refería a su fichaje a la DGA más celebrado. El de Antonio Cobo, que dirigió la fábrica de Figueruelas entre 2010 y 2019 y tuvo cargos importantes en el grupo en Europa. Él se muestra preparado para emplear su experiencia y sus contactos en el intento de que Aragón consiga, esta vez sí, hacerse con una fábrica de baterías, opción que no fructificó ni en el caso de la iniciativa del grupo Volkwagen (la inversión se fue a Sagunto, Valencia) ni en la del grupo indio Tata (este se decantó finalmente por Somerset, en el Reino Unido).

La DGA ha iniciado contactos para atraer el proyecto de Stellantis, al que también opta la fábrica del grupo en Vigo, aunque esta no cuenta ni con el espacio disponible ni la fortaleza en energías renovables de Figueruelas. No obstante, ni los miembros del Gobierno aragonés ni Cobo se han reunido aún con responsables del grupo surgido de la fusión de PSA y el consorcio formado por Chrysler y Fiat para hablar de la gigafactoría de baterías. La decisión sobre su ubicación, según fuentes consultadas por este periódico, aún tardará en adoptarse. El grupo, de momento, solo reconoce que se presentó al Perte VECII, "como parte de nuestro continuo diálogo productivo con el Gobierno español", que está "trabajando con determinación y rapidez para anticipar y apoyar la transición energética de todas sus marcas y sus sitios industriales" y que "evalúa continuamente futuras inversiones en posibles proyectos y programas industriales".

Elevadas inversiones, la plataforma STLA y dos hombres clave

Clave para que Figueruelas –y en su caso Vigo– pueda hacerse con la fábrica de baterías es la adjudicación a estas plantas de la plataforma de producción de coches eléctricos STLA Small, la destinada a coches pequeños. Para que esto ocurra Stellantis estaría preparando inversiones de alrededor de 1.000 millones de euros para estas dos factorías, los necesarios para la puesta en marcha de nuevos modelos eléctricos. En Zaragoza se da por hecha la adjudicación de la plataforma, de la que se habló en las negociaciones del convenio colectivo de la planta, firmado en mayo pasado y en el que la empresa garantizó la actividad productiva de la planta más allá de 2030.

En la decisión sobre la fábrica de baterías nadie duda de que será determinante el posicionamiento del consejero delegado de Stellantis, Carlos Tavares, para quien los costes son fundamentales en cualquier proyecto. Importante puede ser también la opinión de Yann Vicent, CEO de ACC (Automotive Cells Company), la firma participada por Stellantis responsable de las fábricas de baterías. Vicent conoce bien las plantas de Zaragoza y Vigo.

Apúntate a la newsletter de economía y tendrás cada semana las últimas noticias del sector, claves y recomendaciones de expertos.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión