Subida de precios: estos son los productos que ya no entran en la cesta de la compra
Una nueva encuesta realizada por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) revela una notable moderación del consumo desde el pasado mes de enero.
Llenar la nevera ya no cuesta lo mismo que hace unos meses. Ni siquiera que hace unos días. La subida constante de precios, incrementada desde el comienzo de la invasión rusa a Ucrania, supone un gran esfuerzo diario en el bolsillo de los ciudadanos, que ya han comenzado a cambiar sus hábitos de consumo, según un estudio realizado por la Unión de Consumidores y Usuarios (OCU).
Así, "tomando como referencia los resultados de una muestra representativa de la población con edades comprendidas entre los 25 y los 74 años, con más de 1.000 encuestados", apuntan desde la entidad, el resultado es el siguiente: un 42% de los españoles prioriza el consumo de productos de marca blanca, mientras que el 21% reduce la adquisición de alimentos básicos como son las carnes y los pescados, y el 11% aumenta la compra de productos no perecederos.
"Hay que tener en cuenta que el producto fresco es de los más importantes en los hogares. Según nuestras estimaciones supone una media 6.000 euros de gasto anual por familia. Los consumidores tratan de ajustar ahora esta partida, con cambios tanto en marcas y productos, como incluso variando los hábitos de su dieta", apuntan desde la OCU.
Pero no solo en la cesta de la compra han variado, "de manera obligada" las costumbres de los ciudadanos por el alza de los precios, "también lo han hecho en el gasto destinado al ocio". "El 33% está recortando sus salidas a bares y restaurantes, mientras que el 29% ha renunciado o aplazado las compras de ropa, incluyendo, aunque en menor medida, la adquisición de estas prendas para sus hijos", asegura el informe de la OCU. En cuanto a los viajes, un 25% de españoles los ha reducido, así como un 23% ha hecho lo propio en lo relacionado con las actividades culturales.
"Y las expectativas no son positivas". "Cuatro de cada cinco encuestados considera que los precios de la energía y los carburantes seguirán subiendo. De ahí que dos de cada tres, una significativa mayoría, tengan miedo a gastar y prefieran ahorrar para prevenir tiempos más difíciles", añaden desde la OCU.
Momentos que, en el caso de llegar, uno de cada tres ciudadanos ya advierte que no podría soportar al no disponer de ahorros suficientes. "De hecho, un 19% ya considera difícil pagar las facturas y un 21% ha decidido cambiar sus planes de vacaciones", concluye el informe de la Organización de Consumidores y Usuarios.
