sd huesca
Las claves del quiero y no puedo de la SD Huesca fuera de casa
Los azulgranas han sumado nueve puntos de 42 posibles y mantienen una tendencia que quieren revertir este domingo en Ibiza.
La SD Huesca está a tiempo de revertir la tendencia de esta temporada a domicilio, que dicta que el rendimiento fuera de El Alcoraz está muy lejos del mostrado en casa. Tan lejos, que mientras que como locales los azulgranas han sumado 27 puntos, como visitantes han recogido nueve. Tres veces menos. A las reiteradas preguntas, y a veces con gesto de fastidio, técnicos y futbolistas no encuentra una explicación clara a este contraste que se quiere empezar a paliar este domingo en el estadio del colista, el Ibiza (14.00, LaLiga SmartBank TV). Nadie se confía, por muy malos números que luzcan los ibicencos.
Los oscenses exponen que su plan en El Alcoraz no difiere del que tratan de sacar adelante en los desplazamientos. Que no hay dos versiones de la misma SD Huesca. En todo caso, la losa anímica de haber logrado un único triunfo visitante, por 0-1 ante el Real Oviedo el 12 de octubre, pesa sobre los hombros y las cabezas de un equipo muy expuesto a las dificultades que se encuentran en este tipo de compromisos. Ha marcado menos de la mitad de los goles, siete, de los 16 que ha recibido en los 14 partidos fuera de casa, que arrojan un balance de una victoria, seis empates y siete derrotas y remarcan lo caros que se pagan los errores defensivos en partidos cerrados.
Solo empeoran este bagaje cuatro conjuntos que pelean por la permanencia: Ibiza (5), Málaga (7), Lugo y Mirandés (8). La goleada de La Romareda el 10 de diciembre (3-0), actuó a modo de catarsis o punto de inflexión y después, en Burgos, Ziganda implantó el esquema de tres centrales en los desplazamientos. Desde entonces, se han registrado tres empates y la derrota en Las Palmas. No ha servido para ganar pero el entrenador encuentra fortalezas en este cambio de dinámica, a excepción de los malos minutos de la segunda parte en El Molinón.
Ziganda parece medianamente conforme con los resultados que arroja ese cambio de sistema, a la espera de que cambien las tornas en un contexto general. Hasta la fecha, la SD Huesca solo ha puntuado en siete de las 14 salidas y se ha puesto por delante en el marcador en cuatro de esos partidos. Solo ganó uno, el de Oviedo. En las otras tres ocasiones, el Eibar remontó para ganar y se terminó empatando con Burgos (1-1) y Sporting de Gijón (1-1). Cuando los azulgranas han comenzado perdiendo solo se igualó una vez, con el gol de Ratiu en el último suspiro en Miranda de Ebro (1-1).
En esos 14 duelos, la SD Huesca únicamente ha sumado 105 minutos en ventaja y ha visto en algunas situaciones cómo perdía rápidamente el paso. En Albacete en la tercera jornada los manchegos anotaron el 2-1 en el minuto 96. El Eibar dio la vuelta al 0-1 obra de Escriche con dianas en los minutos 86 y 92. El Burgos reaccionó al gol de Joaquín en el descuento de la primera parte con el 1-1 a los tres de la segunda, y el Sporting reaccionó al gol de falta de Óscar Sielva con otro de factura similar 15 minutos después. También han costado puntos los goles tempraneros que marcaron Albacete (minuto 17), Ponferradina (minuto 11) y Real Zaragoza (minutos 3 y 14).
El peso ambiental de estadios como La Romareda también se ha acusado. No se puede decir lo mismo de las expulsiones, pues se han producido dos fuera de casa -Jorge Pulido en Albacete y Rubén Pulido en Gijón- y otras dos en El Alcoraz -Florian Miguel ante el Lugo y Juan Carlos con el Andorra-. El contraste no se refleja en los disparos a puerta, pues la diferencia es de solo diez más en El Alcoraz, con 122 por los 112 intentos lejos del hogar. La pasada campaña se sumaron 24 puntos fuera, 22 en la del ascenso con Míchel Sánchez y 30 en la de Rubi. 25 con Anquela y 29 en la del regreso a la categoría de plata. Lejos de las pobres cifras de esta campaña.
