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El filial gana protagonismo en la SD Huesca
A lo largo del curso, doce jugadores del Huesca B han sido convocados en liga por el primer equipo y de ellos cuatro, Manu Rico, Kevin Carlos, Pol Prats y Euse Monzó, han tenido minutos.
Independientemente de que haya sido por necesidad, por ser una manera de llamar la atención por parte del entrenador, por verdadero convencimiento de su utilidad y valía o por una mezcla de todo, lo cierto es que el filial de la SD Huesca ha contado durante la temporada recién acabada con una presencia en el primer equipo inusual. Solo para los partidos de liga han sido convocados doce y de ellos cuatro han tenido minutos, Manu Rico, Kevin Carlos, Pol Prats y Euse Monzó.
Los factores que explican esta circunstancias son varios. El escaso número de efectivos con el que se comenzó la campaña hizo que la presencia de las piezas del B fuese habitual en las citaciones de Nacho Ambriz y Xisco Muñoz durante la primera vuelta. Con la llegada de cinco refuerzos en el mercado de invierno llegaron a desaparecer y no fue hasta las últimas jornadas, con la aparición de varias bajas y favorecido también porque el curso en 2ª RFEF acabó antes, cuando reaparecieron.
Precisamente, la categoría en la que ha competido el Huesca B también ha ayudado. Desde la refundación del filial nunca los dos principales equipos azulgranas habían estado tan cerca, a solo dos categorías de distancia. Es cierto que previamente se habían producido convenios con clubes como el Almudévar, el Teruel y el Ejea, pero el hecho de que la relación sea directa lo ha hecho más fácil. Además, también han dado un paso adelante proyectos de cantera que el Huesca viene cocinando desde tiempo atrás como Manu Rico y Anglada, que ya han entrado en la órbita de las categorías inferiores de la selección nacional, y Kevin Carlos, autor de 16 goles.
El primer oscense en tener minutos en liga con el Huesca desde 2018 fue Manu Rico, que tuvo tres participaciones consecutivas entre finales de 2021 y principios de 2022. El medio entró en el cierre de la primera vuelta ante el Alcorcón (0-0) a falta de 29 minutos y posteriormente tuvo 26 minutos en el tropiezo con el Girona (0-1) y nueve en la victoria con el Cartagena (0-3).
En ese partido también se vistió de corto el delantero Kevin Carlos, que relevó a Joaquín cuando se cumplía el 90’. El siguiente en debutar fue Pol Prats, extremo llegado en el mercado de invierno. El catalán sumado 35 minutos en los dos últimos compromisos del curso, el triunfo por 3-2 con la Real Sociedad B y el tropiezo del domingo en Valladolid (3-0) en el que el defensa valenciano Euse Monzó disputó nueve minutos.
Además de estos cuatro, han convivido durante los partidos con el primer equipo, aunque sin llegar a jugar, en al menos una ocasión Tiago, Barri, Tomeo, Anglada, Barba, Fuente, Abizanda y Aparicio.
En las dos rondas de Copa también tuvieron presencia. Ante el Cayón, Kevin Carlos marcó el definitivo 0-2 en un día en el que también jugaron Barri y Aparicio, que fueron titulares. Después, Kevin Carlos jugó de inicio en la eliminación a manos del Girona (0-1) al igual que Barba, mientras que Manu Rico salió tras el descanso.
Con las obras ya en marcha en el Pirámide para dar forma a la Base Aragonesa, la futura ciudad deportiva del Huesca, el anhelo del club es que en un futuro la presencia de canteranos en el primer equipo deje de ser una excepción para convertirse en un flujo constante.
