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Ambriz, “muy ilusionado” y “feliz” ante el debut liguero de la SD Huesca
El técnico de los azulgranas afronta la visita del Eibar con la seguridad que le da “un equipo que ha ido de menos a más” y confiado en las posibilidades de un grupo “sin miedo a nada”.
“Emocionado”, “contento”, “feliz”. Nacho Ambriz dibuja una sonrisa en su rostro cada vez que piensa en la visita del viernes a El Alcoraz del Eibar (20.00) que supondrá el inicio de la temporada para la SD Huesca en su vuelta a Segunda División y el debut del técnico mexicano en el fútbol europeo como máximo responsable de un banquillo. La aventura que arrancó para él hace poco más de un mes cuando decidió abandonar su país, donde se había labrado una exitosa carrera, da una zancada ante la que se siente confiado y cómodo a pesar de la presión. “Se acabaron los amistosos, ahora empieza la realidad”, afirmó de forma rotunda en el inicio de su primera rueda de prensa previa a una jornada liguera. “La plantilla aún no está cerrada, pero ya no hay excusas, estamos trabajando muy bien y nos vamos a medir a un adversario que también llega con ilusión, con una plantilla bien conformada y con un técnico que conoce la categoría”, realizó la sinopsis de un duelo que cruzará a dos recién descendidos cuya meta final es la de recuperar el sitio perdido en la élite.
De cara a una puesta en marcha del curso que ni mucho menos será suave, Ambriz observa a sus hombres “sin miedo a nada”. “Si repasamos los partidos de pretemporada, hemos ido de menos a más, veo a los jugadores físicamente bien y aplicando los conceptos que han ido adquiriendo”, analizó el momento actual del bloque que maneja prometiendo que se luchará “los noventa minutos”. “No podemos fallar en el compromiso”, subrayó recordando también el credo futbolístico que quiere que se aplique sobre el césped: “Tener la pelota, ser protagonistas, jugar bien al fútbol”.
Para ello no esconde que, como es lógico ante la falta de rodaje dentro de una competición real, “todavía falta ritmo”, aunque también señala que en el amistoso contra el Mallorca de la semana pasada “casi se logró” la constancia perseguida durante todo el partido. Una cosa tiene clara, “El equipo que salga sabrá cómo jugamos”. Para conseguir eso, con todavía despedidas y llegadas pendientes, lo que ha hecho desde el primer día es centrarse en el bloque de jugadores de la primera plantilla cuya continuidad tenía asegurada. A ellos, ha añadido a los jóvenes del filial, que en algunos casos le han causado gran impresión (tres entrarán en convocatoria) y a los que está decidido a dar minutos si es necesario.
En las dos últimas semanas la confección del vestuario se ha acelerado con las salidas de Sandro y Galán, además de la de Peñaloza, y las llegadas de Ratiu, Buffarini, Miguel y San Román, junto a la renovación de Mosquera. “Son gente de mucho compromiso, que traen ilusión y el deseo de poner su granito de arena para que las cosas nos salgan bien a todos”, valoró de ellos. De Mosquera destacó una ventaja, “conoce la entidad, sabe cómo tiene que jugar y ya fue una parte importante en el anterior ascenso”.
Sobre qué posición es prioritario reforzar mencionó la delantera, donde ahora mismo cuenta con el canterano Carlos Kevin y con Dani Escriche, “que no es un delantero centro clásico, sino más movible”. Al respecto tuvo el miércoles una reunión con la directiva y confía en que pronto se pueda solucionar la situación.
Del Eibar dijo que es “un equipo serio, muy bien trabajado, que sabe presionar en zona alta y que realizar las transiciones de forma muy rápida”. “Es una buen prueba para nosotros, para empezar en casa con el pie derecho”, valoró.
Y para ello, no estará solo. Más de 3.500 aficionados, el 40% del aforo, estarán en las gradas de El Alcoraz por primera vez desde el 7 de marzo del año pasado cuando se ganó al Fuenlabrada por 2-0. “Es algo muy importante, porque es el jugador número doce, el que alienta”, indicó. “Para nosotros será una responsabilidad fuerte, si quieres que tu gente te siga, tienes que dar de adentro a afuera”, recalcó.
